Publicado 25/11/2021 17:09

Humanos decoraban 'joyas' en Eurasia hace 41.500 años

El colgante Stajnia está decorado con un patrón de al menos 50 pinchazos, creando una curva de bucle irregular.
El colgante Stajnia está decorado con un patrón de al menos 50 pinchazos, creando una curva de bucle irregular. - ANTONINO VAZZANA - BONES LAB

   MADRID, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -

   Se ha descubierto un colgante de marfil decorado con un patrón de al menos 50 perforaciones, creando una curva irregular en forma de bucle cuya datación por radiocarbono arroja una edad de 41.500 años.

   Este resultado, publicado en la revista 'Scientific Reports', indica que la joya, hallada en una cueva de Stajnia (Polonia) es el ornamento punteado más antiguo conocido hasta la fecha en Eurasia, adelantándose en 2.000 años a otros casos de este tipo de actividad decorativa, y amplía nuestros conocimientos actuales sobre la cronología de la aparición de objetos decorativos por parte del Homo sapiens en Eurasia.

   Tras su dispersión por Europa central y occidental hace unos 42.000 años, los grupos de Homo sapiens comenzaron a manipular los colmillos de mamut para la producción de colgantes y objetos mobiliarios, como estatuillas talladas, a veces decoradas con motivos geométricos.

   Además de las líneas, cruces y marcas, un nuevo tipo de decoración -la alineación de puntuaciones- apareció en algunos adornos del suroeste de Francia y en figurillas del Jura de Suabia, en Alemania. Hasta ahora, la mayoría de estos adornos fueron descubiertos en excavaciones antiguas, y sus atribuciones cronológicas siguen siendo inciertas. Por ello, las cuestiones relativas a la aparición del aumento del cuerpo humano y a la difusión del arte mobiliaria en Europa seguían siendo muy debatidas.

   El nuevo estudio, dirigido por investigadores del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva de Alemania, la Universidad de Bolonia (Italia) y la Universidad de Wroclaw, el Instituto Geológico Polaco-Instituto Nacional de Investigación de Varsovia y el Instituto de Sistemática y Evolución de los Animales de la Academia Polaca de Ciencias, informa del colgante de marfil punteado más antiguo que se conoce en Eurasia.

    "Determinar la edad exacta de esta joya era fundamental para su atribución cultural, y estamos encantados con el resultado. Este trabajo demuestra que la utilización de los avances metodológicos más recientes en el método del radiocarbono permite minimizar la cantidad de muestras y conseguir fechas muy precisas con un rango de error muy pequeño", afirma Sahra Talamo, autora principal del estudio y directora del laboratorio de radiocarbono BRAVHO del Departamento de Química G. Ciamician de la Universidad de Bolonia.

   "Si queremos resolver seriamente el debate sobre cuándo surgió el arte mobiliario en los grupos paleolíticos, necesitamos datar por radiocarbono estos ornamentos, especialmente los encontrados durante trabajos de campo pasados o en secuencias estratigráficas complejas", añade.

   El estudio del colgante y del punzón se realizó también mediante metodologías digitales a partir de los escaneos microtomográficos de los hallazgos.

   "A través de técnicas de modelado en 3D, se reconstruyeron virtualmente los hallazgos y se restauró adecuadamente el colgante, lo que permitió realizar mediciones detalladas y apoyar la descripción de las decoraciones", señala el coautor Stefano Benazzi, director del Laboratorio de Osteoarqueología y Paleoantropología (BONES Lab) del Departamento de Patrimonio Cultural de la Universidad de Bolonia.

   El ornamento personal fue descubierto en 2010 durante un trabajo de campo dirigido por el coautor Mikolaj Urbanowski entre huesos de animales y algunas herramientas de piedra del Paleolítico Superior.

   En el registro arqueológico de la cueva se han identificado ocupaciones separadas de corta duración por parte de grupos de neandertales y de Homo sapiens. La eliminación del colgante se produjo probablemente durante una expedición de caza en el altiplano de Cracovia-Czestochowa, donde el colgante se rompió y se dejó en la cueva.

   Decoraciones similares aparecieron independientemente en toda Europa

   "Esta pieza de joyería muestra la gran creatividad y la extraordinaria habilidad manual de los miembros del grupo de Homo sapiens que ocuparon el lugar. El grosor de la placa es de unos 3,7 milímetros, lo que demuestra una asombrosa precisión a la hora de tallar las perforaciones y los dos agujeros para llevarla", afirma la coautora Wioletta Nowaczewska, de la Universidad de Wroclaw.

   "Si la curva de bucle del colgante de Stajnia indica un analema lunar o puntuaciones de muerte seguirá siendo una cuestión abierta. Sin embargo, es fascinante que decoraciones similares aparecieran de forma independiente en toda Europa", señala el coautor Adam Nadachowski, del Instituto de Sistemática y Evolución Animal de la Academia Polaca de Ciencias.

   En las hipótesis a gran escala sobre la expansión más temprana del Homo sapiens en Europa, el territorio de Polonia suele quedar excluido, sugiriendo que permaneció desierto durante varios milenios tras la desaparición de los neandertales.

   "Las edades del colgante de marfil y del punzón de hueso encontrados en la cueva de Stajnia demuestran por fin que la dispersión del Homo sapiens en Polonia tuvo lugar tan pronto como en Europa central y occidental. Este notable resultado cambiará la perspectiva sobre el grado de adaptabilidad de estos grupos primitivos y pondrá en tela de juicio el modelo monocéntrico de difusión de la innovación artística en el Auriñaciense", afirma el coautor Andrea Picin, del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva de Leipzig.

   Actualmente se están llevando a cabo otros análisis detallados de los conjuntos de marfil de la cueva de Stajnia y de otros yacimientos de Polonia, que prometen aportar más datos sobre las estrategias de producción de ornamentos personales en Europa central y oriental.