BOGOTÁ, 11 May. (EUROPA PRESS) -
El Fiscal General de Colombia, Eduardo Montealegre, ha denunciado este sábado que uno de los fiscales que investiga el caso del hacker Andrés Sepúlveda Ardila, acusado de espiar a los negociadores del Gobierno y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), ha sido víctima del saboteo de su correo electrónico.
La Fiscalía también ha denunciado en un comunicado que en la noche del viernes, desconocidos entraron en la casa de uno de los investigadores del caso, situada en Bogotá, donde fueron "manipulados" varios muebles y objetos personales.
"Hasta ahora no hay evidencia de que se tratara de un hurto", ha indicado la Fiscalía General, según ha informado el diario 'El Colombiano'. La institución también ha denunciado haber recibido información por la que varios testigos importantes del caso han sido objeto de seguimientos, tanto diurnos como nocturnos.
Por todo ello, Montealegre ha anunciado el inicio de una investigación, para la que ha designado a un fiscal y a un grupo especial de la Policía judicial, que se dedicarán en exclusiva a esclarecer estos hechos, que considera "graves".
Sepúlveda está acusado de interceptar ilegalmente documentos de los negociadores de paz del Gobierno y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) tras hallar en su oficina allanada informes policiales confidenciales pertenecientes a la institución policial.
ESPIONAJE A LA HABANA
Andrés Fernando Sepúlveda, un experto en sistemas de comunicación, ha sido detenido y trasladado al búnker del Ministerio Público en Bogotá. El 'hacker' ha sido detenido por los delitos de violación ilícita de comunicaciones, uso de software malicioso, interceptación de datos informáticos y espionaje, cargos que ya ha negado.
Sepúlveda trabajaría para la campaña electoral de Zuluaga, liderando el equipo de redes sociales y seguridad informática junto a tres miembros de su familia, algo que ha sido confirmado por el 'uribismo', aunque ha subrayado que desconocía las actividades ilegales.
El fiscal general, Eduardo Montealegre, ha explicado que "la idea de las personas que estaban involucradas en esta interceptación ilegal era sabotear el proceso de paz". Incluso habrían accedido a los correos electrónicos de Santos.