QUITO, 22 Dic. (Notimérica)-
La capital ecuatoriana cuenta con el pesebre más grande de Iberoamérica. En la cima de la montaña de Panecillo se encuentra esta escena del Belén que se ve desde todas partes de la ciudad gracias a sus figuras que llegan a alcanzar hasta los 35 metros de altura.
A la majestuosa estatua de la Virgen María que corona esta montaña, compuesta por 7.400 piezas numeradas --que fueron unidas como un rompecabezas--, en estas fechas navideñas se le unen otras ocho figuras para formar esta escena religiosa de dimensiones descomunales.
Las nueve piezas que componen el Pesebre gigante van desde los 10 a los 35 metros de alto. Todas ellas se iluminan para poder ser vistas de noche desde todas partes de la ciudad para festejar las fiestas navideñas.
Para la iluminación del niño Jesús, María, José, los Reyes y la estrella se emplean 19.200 bombillas convencionales y 660 tubos LED, que dibujan las siluetas de estas imágenes de las que disfrutan los quiteños y los visitantes.
Coros navideños y actos teatrales acompañan la iluminación del Belén más grande de Iberoamérica para añadir más ambiente navideño a esta escena bíblica.