CIUDAD DE MÉXICO, 15 Abr. (Notimérica) -
Hace solo cinco años que se celebra el Día Mundial del Arte cuyo objetivo es mostrar al mundo la cultura de las naciones participantes. Se decretó en la XVII Asamblea General de la Asociación Internacional de Artes Plásticas (AIAP), avalada por la UNESCO en Guadalajara (México), la celebración del Día Mundial del Arte para promover la conciencia creativa en todo el mundo.
Gracias a la expresión artística, las culturas se identifican, las sociedades se estimulan y los colectivos se unifican. La creciente falta de interés por el arte debería ser sinónimo de preocupación en la sociedad ya que el arte aporta todos los valores necesarios para mejorar nuestra conciencia y conocimiento. Al principio la celebración solo duraba un día pero actualmente, en México, los festejos ocupan todo un mes.
Una vez más es el museo José Luis Cuevas sede central en México de las conmemoraciones de esta celebración en cuya muestra participarán este año más de 80 países. Año tras año, el evento ha ido ganando peso y ahora, en esta última edición, se entregan tres premios en las categorías de pintura, escultura y fotografía así como menciones honoríficas. Los ganadores tendrán derecho a una exposición individual en algún museo mexicano con la idea de impulsar nuevos artistas y darles una oportunidad.
La exposición está distribuida en tres salas: una asignada a los consagrados maestros mexicanos del arte contemporáneo, otra a artistas conocidos, y la tercera parte, a nuevas propuestas y artistas emergentes.
En el mismo museo se encuentran numerosas actividades a las que cualquiera puede acudir rellenando el formulario de inscripción. Podemos asistir a talleres de mandalas o de acuarelas, pero también a otro tipo de actividades más actuales en las que se combina técnica y modernidad en el color. Es el caso del taller Magnetizarte, dirigido por Silvia Flores, en el que los imanes juegan un papel fundamental en el proceso de creación de la obra.
De acuerdo con los organizadores la exposición quiere demostrar, a nivel mundial, que el arte y la cultura crean fuertes lazos entre las naciones, lazos en los que la violencia no tiene lugar. Por último, pero no menos importante, concienciar a las nuevas generaciones del valor de la cultura. Ellos son los que harán que perdure a través del tiempo y no se convierta en un cuento del pasado.