Actualizado 19/11/2015 15:24

Las líneas de Nazca, amenazadas por el fenómeno de El Niño

Líneas de Nazca
PIXABAY

   LIMA, 19 Nov. (Notimérica) -

   Ante la amenaza del fenómeno meteorológico El Niño, el Ministerio de Cultura de Perú ha puesto en marcha la segunda fase de los trabajos de prevención en lugares arqueológicos como las famosas Líneas de Nazca y muchos más situados en las regiones de Tumbes, Piura, Lambayeque, La Libertad, Lima e Ica.

   En esta segunda etapa se invertirán más de dos millones de dólares y comprende un total de 46 monumentos arqueológicos repartidos por todo el país, como el sitio arqueológico Paredones y geoglifos en Nazca; el sitio arqueológico Mateo Salado y los geoglifos de Yanacoto en Chaclacayo, ambos ubicados en la provincia de Lima; el sitio arqueológico Tambo Colorado, en Pisco; y La Centinela, en Chincha.

   También se protegerán los lugares de Chankillo, en Casma; el Castillo de Huarmey, en Áncash; la Fortaleza de Paramonga, en Lima y Pisquillo Chico, en Huaral.

   Juan Pablo de la Puente, viceministro de Patrimonio Cultural e Industrias Culturales de Perú, anunció que el Ministerio de Economía y Finanzas otorgó una partida adicional que permitirá cubrir las acciones de prevención de esta selección de monumentos, que a pesar de ser una lista extensa, no cubre toda la demanda solicitada.

   Según señala el comunicado del Ministerio de Cultura, los especialistas de la Comisión Técnica han tenido en cuenta una serie de factores a la hora de elegir los monumentos, como aquellos que se encuentren en regiones de intensas lluvias, los que estén construidos especialmente con adobe y barro, los que se encuentren cercanos a ríos cuya crecida pueda afectar a sus estructuras y aquellos que estén en uso público entre otros.

   Según las previsiones, Perú puede ser uno de los países más afectados por el fenómeno El Niño. Este accidente meteorológico se produce mediante el calentamiento de la superficie de las aguas del Pacífico que afecta principalmente el Sureste Asiático, Australia y Sudamérica. Éste se caracteriza por el ingreso de una masa superficial de aguas cálidas en el mar, desde el norte en el caso del Perú, que genera un aumento cambios climáticos anómalos, como el aumento de la temperatura del mar, afectado la pesca, además de intensas lluvias y también sequías.

   PATRIMONIO AMENAZADO

   Las líneas de Nazca que están situadas a 400 kilómetros al sur de Lima en una árida planicie costera, suponen uno de los mayores enigmas de la arqueología debido a su número, naturaleza, tamaño y continuidad.

   Representan criaturas vivas, vegetales estilizados, seres fantásticos y figuras geométricas de varios kilómetros de longitud. Se supone que tuvieron una función ritual vinculada a la astronomía, según la Unesco, que en 1994 las declaró Patrimonio de la Humanidad.

   Sólo pueden ser observadas desde el aire, lo que ha dado lugar a teorías sobre cómo pudieron ser realizadas, sin embargo, la persona que dedicó su vida al estudio e investigación de las líneas de Nazca, la alemana Maria Reiche Neumann, sostuvo que fueron utilizadas por los agricultores para conocer y controlar los ciclos agrarios meteorológicos, además de su posible significación religiosa.

     Pero este mágico lugar de la Tierra, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, viene siendo objeto de 'atentados' que demuestran su vulnerabilidad y, sobre todo, su falta de protección. Uno de los últimos y más polémicos, afectó a la organización ambientalista Greenpeace que fue denunciada por las autoridades peruanas por "invadir" una zona protegida en las históricas líneas, para colocar un mensaje de protesta por el cambio climático.

     Según la Asociación Maria Reiche, que lleva el nombre de la mujer que luchó durante toda su vida por preservar este tesoro arqueológico, uno de los atentados lo constituye la Panamericana, que pasa por las zonas que tienen la concentración mas alta de geoglifos.

     A eso suma la "informalidad, la dejadez de los alcaldes provinciales, distritales y regionales, (los) pilotos avezados que sobrevuelan a tan solo cuatro metros de las Líneas, los saqueos, las invasiones y la minería".

      Además, y según consta en reportes de los medios peruanos, el territorio de las pampas de Nasca, de 450 hectáreas, y que abarca la serie de geoglifos y líneas estudiadas durante muchos años por María Reiche, comenzó a ser vendido ilegalmente por traficantes de terrenos a partir del año 1999.