CIUDAD DE MÉXICO, 16 Oct. (Notimérica) -
Los años 60 marcaron un antes y un después en la historia, sobre todo en Estados Unidos. En el país norteamericano comenzaron las primeras luchas por los derechos de los colectivos sociales que vivían bajo el yugo de la discriminación, como los afroamericanos o los homosexuales.
En particular, el racismo era uno de los mayores problemas al que la sociedad estadounidense debía hacer frente. En esos momentos, la segregación social alcanzó su punto de tensión más álgido y, por ello, las reivindicaciones ya no se producían solo en la calle, sino también en las más altas esferas sociales. Una de las más icónicas tuvo lugar en 1968, durante los Juegos Olímpicos que se celebraban en México.
Ese mismo año, el sociólogo Harry Edwards, fundador del Proyecto Olímpico para los Derechos Humanos, pidió a los deportistas afroamericanos que reivindicaran durante la competición sus derechos y luchasen contra la segregación racial a la que estaban sometidos.
Desde el primer día, muchos de estos deportistas --incluso los blancos-- subieron a los podios descalzos y con calcetines negros en señal de protesta, pero sus actos no tuvieron una excesiva repercusión.
Sin embargo, durante la entrega de medallas de los 200 metros lisos los estadounidenses Tommie Smith y John Carlos, ganadores del oro y el bronce, respectivamente, levantaron el puño tras recibir sus medallas para reivindicar los derechos de las personas de color. Su gesto recorrió el mundo entero, haciendo que aquellas olimpiadas pasasen a la historia como 'Los Juegos del Poder Negro'.
Ambos corredores iban descalzos y empuñaban unos guantes negros. Además, Smith llevaba un pañuelo oscuro en el cuello en representación del orgullo negro, mientras que Carlos se abrió la chaqueta de su chándal en apoyo a los obreros negros estadounidenses.
A lo largo de la historia se ha denominado a este acto como 'El saludo Black Power', del que hoy, 16 de octubre de 2018, se cumplen 50 años. Sin duda alguna, los Juegos Olímpicos de 1968 se recordarán siempre como aquellos que cambiaron el mundo del deporte en términos de igualdad social.