BARCELONA, 21 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Tour de Francia entra en su tercera y última semana de competición con unos Alpes que claramente harán de juez final de una ronda que domina el esloveno Tadej Pogacar (UAE Team Emirates-XRG), en busca de su cuarto Tour, y que tan solo podría tener un cambio de rumbo mediante una gran sorpresa en forma de 'pájara' o de abandono, todo ello antes de volver a los históricos Campos Elíseos de París tras la forzada llegada a Niza del año pasado.
Montpellier será el punto de partida de una decimosexta etapa monopuerto con final en el histórico Mont Ventoux (1.910 metros), en una jornada no muy larga (171,5 kilómetros) pero con 2.950 metros de desnivel acumulados debido al gigantón ventoso de la Provenza, en una de las puertas a unos Alpes que serán decisivos.
Porque Tadej Pogacar, tras su exhibición en los Pirineos, tiene 4:13 minutos de margen sobre el danés Jonas Vingegaard (Team Visma | Lease a Bike) y 7:53 sobre el alemán Florian Lipowitz (Red Bull-BORA-hansgrohe). Un gran dominio que puede convertir en tiranía si en los Alpes se dedica a atacar y a intentar sellar su triunfo. Y el Mont Ventoux puede ser ya ese fuez final.
El Tour de Francia permitirá que prosiga la lucha por el maillot verde de los puntos en Valence, antes de que los 'gallos' vuelvan a mover el gallinero. Será la última jornada totalmente llana, y un Jonathan Milan (Lidl-Trek) que está sobreviviendo a la montaña es el gran favorito a ganar la etapa y a consolidar ese verde, siempre que los Alpes no le apeen de la carrera. Al acecho está Mathieu van der Poel (Alpecin-Deceuninck), aunque Pogacar también podría ganar el maillot verde.
Al día siguiente, en la etapa 18, vuelve la acción hacia arriba en una jornada entre Vif y Courchevel con tres puertos de Categoría Especial (Glandon, Madeleine y Col de la Loze), con 5.500 metros acumulados en total. Tres puertos largos, sobre todo el final con 26,4 kilómetros de subida interminable al 6,5 por ciento de pendiente media, siendo el Souvenir Henri Desgrange (premio en metálico adicional para quien corona este puerto, el más alto, en primer lugar) un bonus moral adicional.
Al día siguiente, Albertville será etapa de una jornada con final en La Plagne, en la última etapa explosiva de montaña y que contará con cinco puertos en apenas 130 kilómetros y con 4.550 metros positivos. El último, La Plagne, coronado de nuevo por encima de los 2.000 metros de altitud sobre el nivel del mar, con 19,1 kilómetros al 7,2 por ciento de pendiente.
La penúltima etapa será accidentada, escenario de una posible fuga camino de Pontarlier, y la 21ª y última etapa regresa a París, a los Campos Elíseos para celebrar los 50 años de la primera llegada en este histórico final, interrumpido el año pasado por la celebración de los Juegos Olímpicos de Paris 2024.