MADRID, 30 Ago. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Villarreal, Unai Emery, confesó el enfado de toda la plantilla por regalar el 2-2 de este domingo en el Wanda Metropolitano, y confió en pasar página para tratar de crecer y asentar el ambicioso proyecto de esta temporada.
"Hemos tenido media hora para acordarnos de las madres de todos y ahora lo analizamos, hay cosas muy buenas. Hay partidos de exigencias mayores y si queremos crecer tenemos que ser capaces de ser equipo en todo. Hoy lo hemos hecho", dijo en rueda de prensa.
El preparador del 'Submarino' lamentó la falta de comunicación entre Mandi y Rulli en el gol en propia que supuso el empate rojiblanco en el último suspiro. "Hemos hecho dos goles magníficos, en nuestro momento, pero hay momentos que tenemos que entender. No es fácil. La última jugada te priva de dos puntos, ganar en el estadio del campeón de Liga. Ha habido falta de entendimiento, comunicación y contundencia incluso", comentó.
"Dolido porque queremos refrendar con los puntos un paso exigente que ambicionamos. Tiene que ser capacidad de sufrimiento como hoy. La eficacia marca tus posibilidades y lo hemos tenido, pero se nos escapa en dos jugadas infantiles", añadió, al tiempo que apuntó que, a su juicio, una entrada de Correa sobre Albiol debió ser roja.
"Tenemos un año muy bonito, pero todavía nos estamos asentando. Preparemos el siguiente partido, si es el sábado contra el Alavés, perfecto", terminó, hablando del aplazamiento planteado por LaLiga ante el parón y los jugadores internacionales convocados para la próxima ventana de la FIFA en la CONMEBOL.