Publicado 27/09/2025 01:11

Europa silencia Bethpage Black con Rahm a la cabeza

Jon Rahm, Team Europa en la Ryder Cup 2025
Jon Rahm, Team Europa en la Ryder Cup 2025 - David Davies/PA Wire/dpa

La Ryder Cup termina su primer día con ventaja europea de tres puntos (2.5-5.5) sobre Estados Unidos

MADRID, 27 (EUROPA PRESS)

Europa amasó una renta de tres puntos (2.5-5.5) sobre Estados Unidos en el primer día de la Ryder Cup 2025 que empezó este viernes en Bethpage Black, recorrido de Nueva York que quedó muy silenciado por la gran actuación que encabezó el español Jon Rahm.

Tantos los 'foursomes' de la mañana (cada jugador alterna un golpe), con un 1-3, como los 'fourballs' (cada jugador juega su bola) de la tarde (1.5-2.5) fueron para una Europa decidida, con la calidad y pasión de los emparejamientos de Luke Donald.

El capitán europeo, de nuevo al frente de casi el mismo equipo que conquistó la Ryder de 2023 en Roma, acertó dando galones a Rahm, que ganó los dos puntos que disputó, con el inglés Tyrrell y el austriaco Josef Straka. Pese a no tener ninguna victoria este año, el de Barrika, campeón eso sí del LIV Golf por segunda vez, demostró su categoría y condición casi intratable en la Ryder.

Además, Rory McIlroy cumplió también su papel de líder, aunque se le escapó medio punto en el cierre de la jornada, el último partido de 'fourballs', ya con el sol cayendo, que evitó una peor sensación para Estados Unidos. Los de Keegan Bradley reaccionaron por la tarde, bajo el aliento de su presidente Donald Trump, mejor en los 'greenes' y algunos clavos a los que agarrarse.

No fue uno de ellos el del número uno del mundo, un Scottie Scheffler negado, tampoco Bryson DeChambeau sumó nada. Fueron el debutante y neoyorquino Cameron Young y Patrick Cantlay quienes evitaron que Europa acallara del todo Bethpage Black. En el temido campo en Long Island, Rahm encabezó a Europa también literalmente, encargado de abrir la Ryder y en la reanudación vespertina.

El único representante español en esta Ryder, junto a su amigo Hatton, superó por 4 y 3 a DeChambeau y Justin Thomas, otro desaparecido en combate. El vasco y el británico no comenzaron bien, por detrás desde el pelotazo de Bryson en el hoyo uno, pero dieron la vuelta al marcador tras una tremenda salvada del español en el sexto hoyo y ganando el 7, también con sudor, y el 8.

Rahm y Hatton resolvieron con autoridad. El "empezar bien" que tanta importancia daban los capitanes fue para Europa y, por detrás, las noticias seguían siendo buenas para los campeones. El segundo y el tercero apenas tuvieron emoción: McIlroy-Tommy Fleetwood y Ludvig Aberg-Matt Fitzpatrick arrollaron a Collin Morikawa y Harris English (5 y 4) y Scheffler-Russell Henley (5 y 3).

USA se alivió con el punto de Xander Schauffele y Patrick Cantlay, por dos arriba, ante Viktor Hovland y Robert McIntyre. El noruego y el escocés fueron a remolque y levantaron una desventaja de dos hoyos para llegar igualados al 16, pero fallaron en los dos últimos para dar oxígeno a los anfitriones.

EUROPA CULMINA EL PRIMER GOLPE

El formato 'fourballs' prometía ver algo más la calidad de los anfitriones, de intercambio de momentos Ryder que hicieron vibrar a los aficionados, pero fueron contados los 'putts', los chispazos en rojo, que hicieron peligrar el colchón europeo. Rahm y Straka se encontraron con Scheffler y JJ Spaun, vencedores (3 y 2).

El austriaco empató el partido tras fallar en el primero y el vasco, tomando la medida al número uno como hizo en Roma, mantuvo su fiable versión para rubricar una gran remontada, sin dejar levantar la cabeza a Scheffler, con el tremendo 'putt' de contestación en el hoyo 15. Por detrás, Fleetwood seguía también su inspiración junto a un Justin Rose que entraba en escena metido en faena.

La pareja inglesa superó por uno arriba a Ben Griffin y un DeChambeau desesperado. Un partido con esos momentos que definen el torneo, de nuevo sonriendo a Europa, con Rose respondiendo a Griffin en el hoyo siete, y unos segundos nueve hoyos pletóricos de azul para dar la vuelta al partido y poner un 2-5 en el marcador.

Antes, Young, tremendo en los primeros nueve, se había impuesto junto a Thomas con claridad, por 6 y 5, a Aberg y Nicolai Hoejgaard. Así, el último partido tomó bastante importancia, la opción de Europa de volver a arrasar por la tarde, y esa espinita se le quedó a un McIlroy que, con todo, cumplió junto a Shane Lowry ante un competitivo Cantlay y Sam Burns.

El norirlandés dejó escapar algún hoyo, pero en el seis y el siete se escucharon sus gritos, también los de Lowry, en un duelo con cuentas pendientes de Roma. Cantlay recuperó el uno abajo en el diez e igualó el toma y daca con McIlroy hasta los últimos hoyos. Ahí, para Estados Unidos irrumpió Burns, aunque en el 18 la opción fue para el número dos del mundo, que falló el último golpe del día.

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