LA PAZ (Reuters) - Chile repitió el sábado la dosis de las dos pasadas eliminatorias derrotando a domicilio por 2-0 a una aguerrida pero inofensiva selección de Bolivia, para confirmarse como gran protagonista del torneo sudamericano rumbo a la Copa del Mundo 2014.
Orden defensivo y contragolpes letales fueron las armas de Chile en las alturas de La Paz, que se impuso con goles anotados en momentos claves por el mediocampista suplente Charles Aránguiz, más de dos minutos después de cumplido el tiempo regular de la primera etapa, y por Arturo Vidal, a los 82.
Presa de la desesperación, Bolivia terminó el encuentro con un jugador menos tras la expulsión del defensor Luis Gutiérrez a los 53 minutos por agresión al astro visitante Alexis Sánchez, y con su técnico Gustavo Quinteros también echado de la cancha por sus airados reclamos al cuarteto arbitral.
Bolivia puso ganas y fuerza, pero terminó doblegada por una escuadra chilena superior, individual y colectivamente, que supo aguantar con orden las arremetidas locales en los inicios de las dos etapas y pasó luego a controlar el juego, apostando casi exclusivamente al contragolpe, que le resultó suficiente.
La selección local reclamó un penal por mano de un defensor chileno en el primer minuto y desperdició en seguida media docena de ocasiones de gol. Bolivia comenzó a perder velocidad y profundidad luego de 20 minutos de juego, cediendo poco a poco el control del balón a los muy ordenados visitantes.
Chile tomó ventaja en la última jugada de la primera mitad, que terminó dominando con una exhibición de variantes ofensivas por las bandas laterales y el centro, que hicieron aflorar grandes desinteligencias en la defensa boliviana.
Se había cumplido el tiempo regular de la primera etapa cuando una rápida jugada de contragolpe, con triangulación al borde del área incluida, dejó a Aránguiz sin marca dentro del área penal para que abriera el marcador con tiro rasante ante la salida del arquero local Daniel Vaca.
El gol permitió a Chile jugar con más tranquilidad en la segunda etapa, cuando Bolivia arrancó de nuevo a todo ritmo y volvió a fallar varias ocasiones de gol.
Ya con un hombre menos y apostando al todo o nada, Bolivia se lanzó al ataque en busca del empate, dejando grandes vacíos en su defensa que los visitantes aprovecharon para contraatacar.
En uno de esos contragolpes, cerca ya del final del encuentro, Vidal recogió sin marca un balón que rebotó del poste derecho del arco boliviano y selló la victoria visitante con un cañonazo desde el borde del área que dobló los brazos al arquero altiplánico.
La victoria permitía a Chile sumar nueve puntos tras cinco partidos, en tanto que Bolivia quedaba sumido en el fondo con sólo un punto.
La selección verde de Quinteros recibirá el sábado 9 de junio a Paraguay, en la sexta fecha de la eliminatoria.