ZURICH, 3 oct, 3 Oct. (Reuters/EP) -
- Integrantes de sindicatos mostraron el jueves una simbólica tarjeta roja a la FIFA en una protesta frente a la sede del organismo en favor de los derechos laborales en Qatar, país que albergará el Mundial 2022.
Cerca de un centenar de manifestantes de la Asociación de Trabajadores de la Construcción y la Madera (BWI, por su sigla en inglés) y del sindicato suizo Unia, ondearon tarjetas rojas frente a las puertas del edificio en el día en que el Comité Ejecutivo de la FIFA iniciaba una reunión de dos días para discutir sobre el torneo.
La FIFA debatirá si, en principio, cambia el torneo de su habitual período de celebración en junio y julio, meses en los que el verano qatarí es muy caluroso, así como la situación de los empleados que trabajen en la construcción de las sedes del torneo.
El diario británico The Guardian publicó la semana pasada que decenas de trabajadores nepalíes murieron en la construcción en Qatar durante el verano.
Mientras tanto, el Confederación Internacional de Sindicatos (ITUC, por su sigla en inglés) dijo que los niveles de mortalidad actuales para trabajadores de Nepal e India, que constituyen el grueso de los 1,2 millones de inmigrantes de Qatar, muestran que una media de 400 muertes al año.
"La gente que está trabajando en las sedes no tiene nada, está sufriendo", dijo Marion Hellman, asistente del secretario general de BWI. "Aún hay tiempo para cambiar las cosas. Queremos un retiro de los patrocinios, por ejemplo, donde la gente es obligada a trabajar, tienen retenido el pasaporte y no pueden escapar".
La BWI agrupa 328 uniones que representan cerca de 12 millones de miembros en 130 países.
"Queremos inspectores laborales en las obras y un compromiso claro del Gobierno (qatarí) y de la FIFA", destacó Hellman.
"Buscamos que haya agua potable, comida, una buena cama donde dormir, habitaciones con aire acondicionado y un buen salario, no sólo siete dólares al día. Quedan 10 años, es un buen momento para hacer cambios".
La FIFA ha expresado su preocupación sobre los reportes sobre las condiciones de trabajo, y el sindicato mundial de jugadores, FIFPro, que estar "profundamente alarmado".