MONTEVIDEO (Reuters/EP) - La selección uruguaya de fútbol no puede conformarse tras la victoria del viernes 4-2 sobre Bolivia ya que afrontará a un Paraguay sediento de venganza en la segunda jornada de la eliminatoria sudamericana al Mundial 2014, dijo el delantero Edinson Cavani.
Uruguay superó como local a Bolivia con un doblete del capitán Diego Lugano y tantos de Cavani y Luis Suárez y la próxima semana visitará a Paraguay en Asunción.
"Los rivales van a venir siempre con los dientes apretados para sacar una victoria porque este Uruguay ha demostrado que tiene un buen equipo, que ha hecho un buen trabajo", dijo Cavani, quien destacó la dificultad del próximo compromiso de la "celeste".
"Para nosotros es un reto traernos los tres puntos de allá porque sabemos que adelante tendremos a un rival que va a tener muchas ganas de ganarnos por lo que se dio en la Copa América", agregó en relación a la goleada 3-0 en la definición del torneo continental.
El entrenador uruguayo, Oscar Tabárez, también destacó que Paraguay será un rival de cuidado pese a su reciente cambio de técnico. Francisco "Chiqui" Arce asumió tras la partida de Gerardo "Tata" Martino.
"Paraguay tiene más o menos la misma base de jugadores. Tiene un esquema de juego bastante parecido y son fieles a su estilo de marcar bien. Son buenos en juego aéreo, van a pelotas divididas y tienen buenos delanteros", dijo Tabárez.
"Tenemos que tratar de limitar los puntos fuertes y ver qué le imponemos", agregó.
Lugano, quien se llevó el inusual título de goleador del partido tras marcar una vez en cada tiempo, coincidió en que su equipo necesita volver a sumar tres puntos para tener tranquilidad en el torneo.
"Es un partido históricamente difícil, un partido diferente", destacó.
"Hay que intentar hacer lo imposible para arrancar esta eliminatoria con el pie derecho", dijo el defensa que milita en el Paris Saint Germain de Francia.