Publicado 26/02/2019 23:06

Integrantes de la selección femenina sb 17 de fútbol de Colombia denuncian acoso sexual de un técnico y un entrenador

Balón pelota campo recurso
LALIGA - Archivo

   BOGOTÁ, 26 Feb. (Notimérica) -

   Varias integrantes de la selección colombiana sub 17 de fútbol han denunciado casos de acoso sexual por parte del técnico Didier Luna y el preparador físico Sigifredo Alonso, dos causas que están actualmente siendo investigadas por la Fiscalía de Colombia.

   Entre las denunciantes se encuentran Carolina Rozo y Angie Lizeth Cano, quienes han hecho públicas algunas de las situaciones a las que se han visto sometidas varias mujeres y jóvenes de la mencionada selección, y han asegurado que no son las únicas víctimas, pero que el miedo impera entre otras integrantes de equipo.

   Rozo ha relatado cómo se dieron los hechos en su caso, el cual estuvo relacionado únicamente con el técnico Didier Luna: "Mi historia comienza en el año 2017, en diciembre, cuando soy convocada a la Selección Femenina Sub 17 a hacer parte del cuerpo médico como fisioterapeuta", recoge 'Marca'.

   En una de las concentraciones en las que Rozo participó, la colombiana explica que todo "transcurrió normal los primeros días, pero ya después de unas semanas el señor empezó con unas afectuosidades hacía mí, con cariños hacía mí que no me gustaron y que obviamente me generaron inconformidad y me generaron mucha presión", explica.

   "Yo le manifiesto entonces a una compañera del cuerpo médico que estaba aburrida y me quería ir, que no quería volver. Sin embargo como estaba recién llegada y no quise hacer el tema público con el comité ejecutivo por no generar más inconvenientes", detalla.

   "Cuando soy convocada para la concentración de enero, el señor sigue con su tónica más fuerte y en un almuerzo se acerca hacía mí con una foto que había publicado en la red social, donde me dice que esa era la mujer que quería para él y que me iba a robar un beso. Es cuando decido poner un alto a la situación", explica Rozo.

   "Cuando iba hacía mi habitación después del almuerzo en las horas de descanso el señor me aborda y me dice que me estaba hablando en serio que quería tener algo conmigo y que quería que fuéramos amigos especiales. Por supuesto, yo le digo que no que ese no era mi objetivo y él, molesto, me dice que tengo que afrontar las consecuencias", relata Rozo, que añade que "a partir de ese momento todo el cuerpo técnico se viene en contra mía".

VARIAS VÍCTIMAS

   Carolina asegura, además, que durante ese pediodo pudo apreciar como el técnico mantenía comportamientos extraños con otras jóvenes del equipo: "Yo vengo observando de atrás unas inconsistencias y unas afectuosidades de parte de él con las jugadoras", indica. Tal y como indica, estos gestos pasaban por "como cogerles la cola, acercarles su cara al rostro de él insinuándoles que le dieran un beso, acariciándoles las espalda...".

   "Todas esas inconsistencias me llevaron a seguir indagando desde lo que me había sucedido a mí y recogiendo pruebas para poner el denuncio", dice Rozo, denunciando que notificó los hechos a sus jefes inmediatos de la selección: "Hago el denuncio en la segunda concentración en enero de 2018 antes del viaje a mi jefe, Carlos Ulloa [...] Él me dijo que iba a hablar con el jefe de él a ver qué podíamos hacer pero nunca pasó nada".

   También, Rozo cuenta que informó al delegado que acompañaba entonces a la Federación, Jesualdo Morelli, pero "él me dice que no es el momento porque estamos en competencia, de tensión con las niñas. No pasó nada, llego de Argentina y la Federación nunca se comunica conmigo", asegura Carolina.

   Ante esto, Rozo acude a la Fiscalía para hacer formal la denuncia, y fue entonces cuando fue amenazada: "Yo recaigo en un tema de depresión de salud porque recibo una llamada al siguiente mes en la que me dicen que si yo fui el que puso las denuncias ante el señor Didier Luna y Sigifredo Alonso. No se identificó la persona que me llamó que en dos días iban a mandar a alguien muy duro de la Federación y que donde se enteraran tenía que asumir las consecuencias", explica.

CONSECUENCIAS

   Respecto a Sigifredo Alonso, Rozo asegura que "conmigo nunca se metió con esos temas pero sí una de las deportistas casualmente salió lesionada y fue cuando me comentó unas semanas antes de viajar a Argentina de lo que había hecho y de lo que le había sucedido. Esa denuncia también se encuentra en la Fiscalía", aclara sobre Sigifredo.

   Sin embargo, mientras que Alonso fue apartado de la Federación inmediatamente, Luna permanece formando parte. ¿Por qué? "No sé qué intereses hay con este señor Luna. Realmente estoy desconcertada de ver que no han tomado acciones con este señor. Este señor lleva mucho tiempo en el fútbol y me aterra pensar que han pasado muchas niñas por manos de él y de pronto han estado en situaciones como las mías y se han quedado calladas".

   "El tema también del machismo se podría generar ahí, porque el fútbol siempre lo han visto como un deporte de hombres no le han dado importancia a la mujer en el fútbol, aun reconociendo que en Colombia hay tanto talento y que el fútbol femenino ha dejado tantas cosa lindas también. No entiendo por qué", manifiesta Rozo.