Actualizado 06/02/2012 22:30

Militares intentan sofocar huelga policial Brasil

SAO PAULO (Reuters) - Soldados brasileños sitiaron el lunes a centenares de policías militares en huelga en Salvador de Bahía para intentar sofocar una protesta que disparó la violencia en una de las sedes de la Copa Mundial del 2014 y representa un duro golpe para la imagen internacional del país.

Las autoridades del estado de Bahía acusaron a los policías en huelga por reclamos salariales de estar detrás de algunos de los 94 homicidios registrados desde el inicio de la protesta el 31 de enero, más del doble de la tasa habitual.

Más de 3.200 soldados fueron enviados a Bahía para patrullar las calles y contener la ola de violencia, en una de las mayores militarizaciones de las que se tenga memoria en Brasil.

Soldados y blindados del Ejército rodearon en la madrugada del lunes el edificio de la asamblea legislativa en Salvador de Bahía, donde están atrincherados unos 300 policías militares y algunos de sus familiares.

"Tenemos dos frentes de negociación, uno en relación a la desocupación de la asamblea y otro en relación al movimiento (huelguista)", dijo a Reuters el secretario de Comunicación del gobierno estatal de Bahía, Robinson Almeida.

"Esperamos que las negociaciones de resultados positivos incluso hoy mismo", añadió.

La crisis expone los riesgos de seguridad en esta nación del BRICS con una pujante economía pero que arrastra serios desafíos sociales.

Salvador, cuyo centro colonial de calles de adoquines y fachadas de colores es patrimonio mundial de la UNESCO, es uno de los principales destinos turísticos de Brasil. Su carnaval debería atraer a miles de turistas a fines de este mes.

La ciudad de unos 5 millones de habitantes será además una de las sedes de la Copa Mundial del 2014.

El consulado de Estados Unidos en Río de Janeiro emitió el fin de semana una advertencia, pidiendo a los turistas que no viajen a Bahía hasta que mejoren las condiciones de seguridad.

Pero los operadores turísticos dicen que es demasiado pronto para calcular el impacto económico de la huelga.

"En los puntos turísticos las cosas están transcurriendo con normalidad, pero nos preocupa el impacto a futuro", dijo Maria Angela Ballalai de Carvalho, vicepresidenta de la Asociación Brasileña de Agencias de Viajes.

"Si esto dura podemos tener cancelaciones futuras y puede afectar el número de turistas que vengan para el carnaval (...) Si esto dura puede afectar la imagen del país", dijo a Reuters.

Los policías en huelga reclaman un aumento salarial de un 30 por ciento. El gobierno de Bahía les ofreció un incremento del 6,5 por ciento.

El gobernador del estado de Bahía, Jaques Wagner, dijo que sospechaba que los crímenes eran fomentados por los huelguistas. "La estrategia de ellos es crear pánico", dijo al diario Folha de Sao Paulo.

Las autoridades emitieron órdenes de captura contra unos 12 oficiales que lideran la protesta.