Actualizado 11/06/2010 15:56

MUNDIAL-Muerte bisnieta de Mandela ensombrece inicio de torneo

Por Barry Moody

JOHANNESBURGO (Reuters/EP) - Nelson Mandela canceló su asistencia a la inauguración del Mundial de fútbol en Sudáfrica el viernes, luego de que una bisnieta suya falleciera en un accidente de tránsito, opacando las celebraciones por el inicio del mayor acontecimiento deportivo de la historia de Africa.

Al ex presidente sudafricano, de 91 años, se le atribuye el lugar de padre de Sudáfrica tras el final del apartheid, y una confirmación sobre su presencia en el partido inaugural desató un frenesí patriótico antes del evento, que comenzará con la selección local enfrentando a México, desde las 1400 GMT.

Mandela, cuyo estado de salud es frágil, desestimó la posibilidad tras saber que su bisnieta Zenani, de apenas 13 años, había muerto mientras se dirigía a su casa en coche proveniente del concierto que abrió el Mundial el jueves por la noche.

El conductor del vehículo que la atropelló fue arrestado y la policía dijo que estaba investigando el caso de homicidio culposo.

Zenani Mandela, que murió dos días después de su decimotercer cumpleaños, era una de los nueve bisnietos del ex mandatario, cuyo enorme carisma y prestigio son algunas de las causas a las que se atribuye el hecho de que la Copa del Mundo esté en Sudáfrica.

"Estamos seguros de que los sudafricanos y personas de todo el mundo mostrarán solidaridad con el Sr. Mandela y su familia como consecuencia de esta tragedia", expresó la fundación del ex presidente.

La muerte ensombrece un entusiasmo sin precedentes en Sudáfrica, que durante años se ha visto atormentada por el pesimismo de que el acontecimiento deportivo más visto del mundo era demasiado grande para gestionarse en el continente africano.

Ese pesimismo se ha transformado en las últimas semanas y los sudafricanos de todas las razas apenas pueden contener su orgullo de estar en la escena principal del planeta.

"Hemos estado esperando durante años este momento, rezando para que sucediera", confesó el aficionado local Nicolas Sello, de 54 años.

Llegó al estadio Soccer City al amanecer, 10 horas antes del pitido inicial, ataviado con una camisa especialmente confeccionada que recuerda a la bandera nacional del país. No fue el único. Las trompetas conocidas como vuvuzelas podían oírse antes del amanecer en todo el país.

En tanto, decenas de aficionados mexicanos vestidos como mariachis con sus característicos sombreros bromeaban con los sudafricanos en las afueras del estadio, prometiendo arruinarles su gran día.

MUCHO EN JUEGO

Albergar con éxito este torneo que se realiza por primera vez en Africa supondrá mucho más para los organizadores que un simple deporte.

En juego está la reconciliación racial, la reafirmación de una nación post-apartheid que a menudo atraviesa problemas, futuras inversiones y millones de dólares dejados por turistas.

También es un símbolo de la emergencia de Africa tras décadas de estereotipos que lo retrataban como un continente de desastres, conflictos y fracasos que se ha convertido en una región dinámica con más inversiones extranjeras que nunca.

El que parecía un sueño improbable comienza el viernes por la tarde, en el estadio Soccer City de Johannesburgo, de 90.000 espectadores, que imita la forma de una "calabash", una típica olla africana.

Los mexicanos no sólo tendrán que lidiar con el frenesí de fervor patriótico sino también con el molesto sonido de las vuvuzelas, tan alto que puede casi impedir la comunicación entre jugadores y entrenadores.

Aunque en su momento la selección sudafricana fue señalada como una de las más débiles del Mundial -y aún lo es- los 12 partidos invicto con los que llega el equipo al torneo implican que tiene la confianza alta.

PROBLEMAS

Una serie de crímenes relativamente menores sufridos por periodistas y tres futbolistas griegos en los últimos días hizo subrayar los riesgos de uno de los países más violentos del mundo fuera de una zona de guerra.

Seis personas resultaron heridas el jueves en una disputa entre el público en la principal zona de hinchas de Ciudad del Cabo, cuando miles intentaron ingresar.

La muerte de la bisnieta de Mandela, producida un día después de que tres turistas británicas fallecieran en un choque en autobús, destacó el hecho de que los visitantes afrontan peligro en las calles, y no sólo por el crimen.

En el otro partido del día por el Grupo A, Francia saldrá al campo ante Uruguay en Ciudad del Cabo con una fuerte presión, luego de una serie de amistosos con resultados poco lucidos que culminó con una derrota 1-0 ante China.

'Les Bleus' parecen muy lejos del formidable equipo que ganó el Mundial en 1998 y la Eurocopa 2000. Uruguay, por su parte, ha logrado buenas victorias frente a Suiza e Israel.