Actualizado 17/06/2014 20:57

MUNDIAL-Selección iraní tiende puentes con Estados Unidos pese a larga enemistad

Por Alan Baldwin

CURITIBA, Brasil, 17 jun, 17 Jun. (Reuters/EP) -

- El aburrido empate sin goles de Irán contra Nigeria en su debut en el Mundial de Brasil pudo no ser muy auspicioso para el fútbol pero demostró el poder del deporte para superar divisiones políticas.

Entre los sustitutos que no ingresaron en Irán se encontraba el defensor Steven Mehrdad Beitashour, quien es originario de San Jose, California, y juega en el Vancouver Whitecaps de la liga estadounidense, la Major League Soccer.

Si las cosas hubieran sido diferentes, el graduado de la Universidad de San Diego podría estar jugando en la selección de Estados Unidos, que poco después del empate entre Nigeria e Irán logró un inicio triunfal en su aventura en tierras brasileñas.

El jugador de 27 años fue convocado por Estados Unidos para un amistoso en el 2012, pero no jugó y terminó optando por representar al país de sus padres.

Beitashour no es el único ciudadano estadounidense que apoya a Irán en el Mundial, ya que el equipo técnico del entrenador de la selección asiática, Carlos Queiroz, incluye a Dan Gaspar, también nacido en el país norteamericano.

También hubo varios hinchas en el estadio Arena da Baixada en la tarde del lunes vistiendo los colores rojo, blanco y verde de la república islámica y hablando con acento estadounidense.

Uno de ellos fue Nima Ameri, un abogado que viajó desde Nueva Jersey y obtuvo entradas para el partido.

"Soy alguien que nunca estuvo en Irán. Nací en la Costa Este (de Estados Unidos) y trabajo en Manhattan. Y aquí estoy", dijo Ameri a Reuters Televisión.

"El fútbol es un deporte que no tiene política, no tiene gobiernos, solo tiene nacionalidad, tu nación y tu país (...) La selección nacional iraní tiene un enorme apoyo de todos, independientemente de la política", remarcó.

La diáspora iraní, en gran parte formada por muchos que abandonaron el país tras la revolución de 1979 que derrocó al shah y convirtió a la nueva república en un enemigo implacable de Estados Unidos, también está reflejada en el equipo.

Cinco de los titulares en el partido del lunes juegan en el exterior. Además, el entrenador Queiroz realizó un trabajo de reclutamiento de jugadores nacidos en el extranjero con ascendencia iraní, como es el caso de Beitashour.

El arquero Daniel Davari, que estuvo entre los suplentes en el debut, nació y juega en Alemania. El delantero Ashkan Dejagah jugó para selecciones alemanas juveniles, mientras que Reza Ghoochannejhad emigró a Holanda cuando era niño.