SAO PAULO (Reuters) - Corinthians buscará alcanzar su primera Copa Libertadores el miércoles cuando reciba a Boca Juniors en el duelo que definirá el nuevo dueño del máximo galardón del fútbol sudamericano, mientras el rival espera extender el predominio de equipos argentinos sobre rivales brasileños en las finales del torneo.
El cuadro paulista llega al encuentro motivado por la igualdad 1-1 que se trajo de Buenos Aires con un gol postrero del atacante Romarinho, que equiparó el marcador tras el tanto del defensor de Boca Facundo Roncaglia, quien podría perderse el encuentro definitorio debido a un problema administrativo.
Dado el empate en el partido de ida, ambos cuadros están obligados a ganar para asegurar el título. Pero según las bases del torneo, una nueva igualdad en Sao Paulo llevaría a un alargue de 30 minutos y luego a una definición a tiros penales para definir al campeón.
Ante este último escenario surge como un duro obstáculo el meta de Corinthians, el espigado Cássio, quien tras arrebatar la titularidad en octavos de final al portero Julio César, ha resultado clave para mantener el invicto del equipo en el torneo.
El guardameta reconoció el peso ofensivo de Boca, que dirige Julio César Falcioni, donde el volante Juan Román Riquelme posee un rol principal.
Riquelme "es el gran peligro, un hombre fuera de lo normal. Tenemos que cuidarnos de él. También cuentan con Santiago Silva, que es un delantero fuerte, que aguanta el balón y cabecea. Además está (Pablo) Mouche, que es muy rápido", comentó.
"Siempre logro atajar uno ó dos penales, fueron más las veces que gané que las que perdí", agregó el jugador consultado por una eventual definición desde los 12 pasos.
La Libertadores es la gran apuesta de Corinthians, que ha tenido un paso irregular por el campeonato local, donde marcha en el penúltimo lugar de la tabla cuando ya se han jugado siete fechas del Brasileirao.
Por el lado de Boca, que ha sido seis veces campeón y juega su décima final, el galardón sudamericano surge como una atractiva compensación luego de que el equipo xeneize dejara escapar el título del Clausura argentino en la penúltima fecha y permitiera que Arsenal de Sarandí se alzara como campeón.
"Me imagino un partido muy parecido al de ida. No creo que varíen mucho el juego. Se va a dar todo de la misma manera", dijo el portero de Boca, Agustín Orión, sobre el esquema de dos equipos que priorizan el orden defensivo.
"Los brasileños se sienten incómodos contra los argentinos. Las estadísticas pesan y espero que podamos seguir alimentando eso", agregó.
Equipos de Argentina y Brasil se han enfrentado en 12 ocasiones por la final del torneo, con nueve victorias para los conjuntos argentinos y solo tres para los brasileños.
Boca se vería obligado a descartar al lateral Facundo Roncaglia, quien no viajó a Sao Paulo con el equipo y se perdería la final al fracasar las gestiones por el seguro exigido por su nuevo club, Fiorentina de Italia, para autorizar su participación.
Las probables formaciones de los equipos finalistas son:
Corinthians: Cassio; Alessandro, Chicao, Leandro Castán, Fabio Santos; Ralf, Paulinho, Danilo, Alex; Jorge Henrique y Emerson.
Boca Juniors: Agustín Orion; Franco Sosa o Clemente Rodríguez, Rolando Schiavi, Matías Caruzzo, Rodríguez o Juan Sánchez Miño; Pablo Ledesma, Leandro Somoza, Walter Erviti; Juan Román Riquelme; Pablo Mouche y Santiago Silva.
El duelo será arbitrado por el colombiano Wilmar Roldán y se disputará a las 21.50 hora local del miércoles en el Estadio Pacaembú de Sao Paulo, donde se espera la asistencia de unos 45.000 espectadores.
(Por Claudio Cerda, Editado en español por Ignacio Badal)