MADRID 9 Ago. (EUROPA PRESS) -
El pívot del Barça y de la selección española Willy Hernangómez afronta con ganas el Eurobasket 2025, en un ambiente totalmente diferente al que ha vivido seguramente con su club, ya que en 'La Familia' es capitán, titular y pieza clave, mientras que en el equipo 'culer' ha sido en muchos momentos un jugador secundario, llegando incluso a no saltar a la pista a pesar de la falta de efectivos del equipo.
El jugador madrileño declaró en la presentación del combinado nacional que para él jugar con la selección es "algo único", describiendo un sentimiento de "felicidad, diversión y sacrificio". Debutó con España en 2015, ha ganado cinco medallas desde entonces, es el capitán de 'La Familia', fue el 'MVP' del pasado Eurobasket y parte con un rol importante de cara a la cita de este verano, más si cabe tras la baja de Usman Garuba.
Con España, sus números en los últimos torneos son buenos, con una anotación media que no baja de los 10 puntos por partido. Por ello, el mayor de los Hernangómez encara el Eurobasket con la energía que le da jugar con la selección, en la que olvida los problemas que tiene en su club y se centra en 'La Familia', que, en sus propias palabras, fue la verdadera 'MVP' del último Eurobasket. "Siempre he dicho que cada año estaba esperando poder venir en verano a la selección, porque disfruto muchísimo y últimamente he tenido más papel importante", remarcó.
El madrileño lleva ya diez años apoyando sin ausencias a la doble campeona del mundo, con su primer gran torneo internacional en el Eurobasket de 2015 donde apenas tuvo protagonismo en un equipo que tenía por dentro a Pau Gasol y Felipe Reyes y con el que logró el primero de sus tres oros. Un año después estuvo en sus primeros Juegos Olímpicos, en Río de Janeiro (Brasil), aumentó su presencia en pista, con actuación destacada en cuartos ante Francia (16 puntos y 5 rebotes) y medalla de bronce.
Tampoco falló en el Eurobasket de 2017, donde España fue bronce, pero la presencia de los hermanos Gasol le seguía cerrando un tanto el paso y tuvo que esperar dos años más para empezar a ser importante. Fue en el Mundial de 2019 de China, donde era el encargado de dar aire a Marc Gasol y sobresalió principalmente en el choque de cuartos ante Polonia (18 puntos) de una cita donde España se proclamó campeona del mundo contra todo pronóstico.
Los Juegos de Tokio de 2021 no fueron tan positivos y se bajó por primera vez del podio, pero un año después fue uno de los líderes del gran y sorprendente título continental, lo que le valió ser elegido como el 'MVP' del torneo. Ya como el pívot titular de Sergio Scariolo, promedió 17,2 puntos, 6,9 rebotes, y casi 20 de valoración por partido, con 14 puntos y 8 rebotes en la final ante Francia y Rudy Gobert. En el Mundial de 2023 (18,2 puntos y 5,3 rebotes) y los Juegos de París de 2024 (11,7 y 5) mantuvo su estatus, aunque la selección no pudo pelear por los metales.
El pasado Eurobasket, el pívot lo jugó perteneciendo a los New Orleans Pelicans de la NBA, hasta que en 2023 se convirtió en agente libre y, ante la falta de minutos, decidió volver a España para jugar en el Barça pese a haberse criado en el Real Madrid. Sin embargo, en el conjunto catalán no ha podido ofrecer todo lo que se esperaba de él y ha terminado siendo objeto de debate por su poca participación en los partidos importantes, sobre todo esta temporada con Joan Peñarroya.
El técnico catalán declaró en enero que no le utilizaba porque había otros jugadores que ayudaban al equipo a ganar los partidos. "Willy trabaja bien, pero creo que hay otros jugadores que nos ayudan a sacar los partidos. Es una decisión técnica. Para él es complicado, pero no hay que darle más trascendencia", expuso Peñarroya tras varios encuentros sin darle minutos.
SU HERMANO, UN AÑO NOTABLE EN PANATHINAIKOS
Con el avance de la temporada, y a raíz de las bajas que iba teniendo el equipo, que acabó el curso con nueve jugadores de la primera plantilla, el madrileño acabó jugando más y aumentando su protagonismo, brillando en el 'playoff' de Euroliga ante el AS Monaco en el tercer (19 puntos y 10 rebotes) y el quinto partido (16). Pero su minutaje respecto a la temporada 23-24 bajó mucho tanto en Liga Endesa (de 690 minutos a 537) como en la Euroliga (de 617 a 538).
Willy Hernangómez es en esta selección el único superviviente del Mundial de 2019 junto a precisamente su hermano Juancho, que llega al torneo continental como segundo capitán del equipo y, que al contrario que el pívot, ha firmado una segunda temporada muy buena en el Panathinaikos griego.
De hecho, el alero madrileño formó parte del segundo mejor quinteto de la Euroliga, promediando 27 minutos, 10 puntos y 7 rebotes por partido a las órdenes de un Ergin Ataman que había sido muy duro con él en primer año en el 'PAO'. De hecho, dobló sus minutos, pasando de 508 a más de 1.000 y ante el Anadolu Efes turco se fue hasta los 40 de valoración gracias sobre todo a sus 20 puntos y 16 rebotes.
Juancho Hernangómez, con la selección desde 2017 y que desde entonces sólo se perdió los Juegos de Tokio por lesión y tras no recibir el permiso de los Minnesota Timberwolves, es otro jugador ahora clave para Scariolo, por su versatilidad para jugar de '3' o de '4' y su capacidad para anotar y rebotear, y llega animado tras su buen año y con el recuerdo de su magnífica final del Eurobasket de 2022 donde firmó 27 puntos, con un demoledor y clave 7/9 en triples. En ese torneo, dio su mejor versión seguramente superando los dobles dígitos de anotación en siete de los nueve partidos.