Publicado 26/07/2020 12:15

El valenciano Miguel Herráez llega a editoriales internacionales con un ensayo sobre Cortázar y su novela "más personal"

Cultura.- El valenciano Miguel Herráez llega a editoriales internacionales con u
Cultura.- El valenciano Miguel Herráez llega a editoriales internacionales con u - CEDIDA POR MIGUEL HERRÁEZ

   VALNCIA, 26 Jul. (EUROPA PRESS) -

   El ensayo 'Julio Cortázar, una biografía revisada', del escritor y profesor valenciano Miguel Herráez, ha sido publicado en Rusia, tiene pendientes una edición revisada en Argentina y otra en Turquía y, además, este próximo otoño dará el salto al audiolibro. Ya son cinco ediciones, sin contar impresiones, en cuatro editoriales diferentes nacionales e internacionales. Además, acaba de llegar a Argentina 'La mitad de la memoria', su novela "más personal".

   La sombra de Cortázar impregna buena parte de Herráez, lo que se puede percibir en ensayos como 'Dos ciudades en Julio Cortázar', y en algunos de sus relatos, los cuales ha publicado en siete volúmenes recopilatorios.

   Pero al margen de su obra en torno a Cortázar, Herráez ha desarrollado una propia como novelista, con cinco trabajos muy diferentes que son postales de la España reciente: 'Click' (1994), 'Confía en mí' (1999), 'Bajo la lluvia' (2000), 'Detrás de los tilos' (2007) y 'La vida celular' (2014).

   Ahora acaba de publicar en Argentina 'La mitad de la memoria' (Babel Editorial), su novela "más personal". En ella, dos hermanos se dirigen en coche desde España al sur de Francia en busca de un tercero al que no ven desde hace treinta años y que vive refugiado en el país galo desde el tardofranquismo por un suceso en el que participó como miembro de una célula política. Les ha llamado para hacerles una importante confesión.

   El trayecto, comprimido en setenta y dos horas (un día de ida, uno de estadía y otro de regreso), permite al narrador reflexionar acerca de su familia, su madre, sus hermanos, sus parientes, y también sobre sus contradicciones frente al mundo y sobre su propia crisis vital, al cumplir 47 años.

   Escrita en primera persona, la novela ofrece una disección de las relaciones familiares a lo largo de las últimas décadas en España, que son mostradas en toda su complejidad, con secretos, preguntas sin formular y adicciones aceptadas por la sociedad, como los optalidones a los que es adicta la madre de los protagonistas.

   Pero, advierte Herráez, "el motor narrativo básico es la toma de conciencia del personaje principal de que somos seres temporales, de que ha consumido buena parte de su vida, y la convicción de que el tiempo biológico, es inalterable, carece de retorno".

"ROAD-NOVEL"

   A diferencia de otras ocasiones, Herráez no ha ambientado el relato en al pasado reciente, sino que lo ha ubicado en el ahora. "En esta novela, una suerte de road-novel, me alejo del tardofranquismo, ya que su trama está localizada en lo que llamaríamos la actualidad, dado que hay pequeños guiños situacionales a partir de referencias a Trump o al Brexit o a nuestra propia realidad política", comenta el autor.

   Pese a estas referencias claras y a las reflexiones del protagonista sobre ellas, Herráez advierte de que su última obra de ficción "no es una novela política".

   "Mis novelas no lo son --puntualiza-- pero sí proyecta un juicio, claro. Nadie carece de ideología; quien dice que no tiene ideología, eso es también una forma de ideología", apunta.

   "Es un relato con algo más de épica, aunque en su discurso nunca abandono los rasgos que me son tan queridos del monólogo a veces irónico, una temporalidad de la anécdota muy acotada (tres días), la escritura viva pero nunca construida en función de un simple suceso, la reflexión permanente de la caducidad de nuestras vidas y, sobre todo, la memoria, su juego proustiano y su determinación en el día a día del presente", concluye.