MADRID, 10 Dic. (EUROPA PRESS) -
Al menos cuatro niños han muerto este martes en un ataque con morteros en la localidad afgana de Baraki Barak, ubicada en la provincia de Logar (norte), lo que ha provocado una protesta contra las autoridades.
Los residentes se han concentrado frente a la oficina del gobernador de Logar junto a los cuerpos de los fallecidos para exigir que se aclare quién ha efectuado los disparos.
Abdulmatin Hasanjil, comandante del Ejército, ha señalado que el mortero podría haber sido disparado por las fuerzas internacionales, si bien por el momento no hay confirmación oficial.
Sin embargo, un residente ha señalado en declaraciones a la cadena de televisión afgana Tolo TV que "el ataque llegó desde el campamento (de las fuerzas extranjeras)". "No hay talibán en esa zona", ha agregado.
Por su parte, las fuerzas estadounidenses en Afganistán han dicho ser conscientes de las informaciones y ha recalcado que "trabaja con los socios locales para poder esclarecer la situación".