MADRID, 24 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea, Estados Unidos y la OTAN han llamado este viernes a los talibán a "poner fin a su ofensiva" y han instado a los mismos y al Gobierno de Afganistán a negociar, así como han reconocido que "llevará tiempo" alcanzar un acuerdo político en el país.
"Reconocemos que probablemente llevará tiempo llegar a un acuerdo político definitivo, incluida la Constitución", han apuntado en una declaración conjunta firmada también por Alemania, Italia, Noruega, Reino Unido y la OTAN, tras su reciente reunión en Roma para discutir la situación en Afganistán y la evolución de la paz en Afganistán.
En la misma, han expresado su "compromiso" con "una sólida asociación con Afganistán" y han incidido en que seguirán "de cerca" los desarrollos en curso en esta nueva fase de transición con la retirada de las fuerzas internacionales.
Asimismo, han manifestado sentirse "profundamente preocupados" por los "altos niveles de violencia, la ofensiva militar de los talibán y la cantidad de abusos y violaciones graves de Derechos Humanos denunciados en las comunidades más afectadas por el conflicto armado en curso en todo el país".
"Hacemos un llamado a todas las partes para que reduzcan la violencia y protejan a los civiles, respetando sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario", han reclamado al respecto, para llamar a los talibán a "poner fin a su ofensiva militar y a la República Islámica a participar de manera significativa en el proceso de paz".
Así, la UE, EEUU y el resto de países han reiterado la "urgencia" de alcanzar un alto el fuego para "asegurar el éxito de las negociaciones", una cuestión en la que han reconocido los "sacrificios" de las fuerzas de seguridad afganas.
"Expresamos nuestro pleno apoyo a un proceso de paz inclusivo de propiedad y dirección afgana con la participación plena y significativa de las mujeres que conduzca a un arreglo político justo y duradero", han apostillado.
Además, han afirmado su intención de mantener el apoyo a las instituciones afganas, incluidas las fuerzas de defensa y seguridad, para "atender las necesidades urgentes del país", al cual se seguirá asistiendo en función "de la buena gobernanza y el compromiso con el estado de derecho y los Derechos Humanos.
En concreto, se han referido a cuestiones como la preservación de los logros obtenidos por las mujeres y las niñas en las últimas dos décadas, así como de que el Gobierno adopte medidas "significativas" para abordar la corrupción y cumplir los compromisos asumidos en la Conferencia de Ginebra de noviembre de 2020.
Por otro lado, han subrayado que toma "debida nota" de las exposiciones informativas del jueves de los representantes de la República Islámica del Afganistán y los talibán y acogen "con beneplácito" las conversaciones celebradas en Doha el 17 y 18 de julio entre altos líderes de las dos partes.
También, han aseverado que acogen el compromiso declarado de las dos partes de "acelerar las negociaciones hacia un arreglo político inclusivo y de volver a reunirse en un futuro próximo". "Creemos que las reuniones futuras deberían centrarse en cuestiones centrales que serán fundamentales para alcanzar un acuerdo político inclusivo", han remachado al respecto.
En esa línea, han aplaudido "los compromisos asumidos ayer por los talibán con una gobernanza inclusiva, el respeto de los Derechos Humanos y el cumplimiento de los compromisos contra el terrorismo" y han saludado a "su apertura para negociar un mecanismo de gobierno representativo con el equipo de negociación de la República Islámica".
"Instamos a las dos partes a que acuerden una cesación del fuego permanente y amplia y principios fundamentales para el futuro Estado afgano y detalles de los arreglos de gobierno de transición hasta que se alcance un arreglo político definitivo", han insistido en la declaración, en la que han reiterado que para promover el progreso en las negociaciones, apoyan "cualquier facilitación o mediación de terceros bien recibida por las dos partes".
De este modo, han reiterado que ambas partes deben cumplir sus compromisos "de evitar que el uso de suelo afgano por parte de Al Qaeda, Estado Islámico u otros grupos terroristas lancen ataques o amenacen la seguridad de cualquier otro país", así como el de "no albergar a miembros de estos grupos ni permitirles reclutar, capacitar, recaudar fondos o transitar por Afganistán".
Ante ello, han pedido a los talibán "reducir la violencia, cumplir sus compromisos de proteger la infraestructura de Afganistán, proteger a los civiles y cooperar en la asistencia humanitaria", entre otras cuestiones.
"Reclamamos a los talibán que permitan y faciliten, sin condiciones previas y de conformidad con el derecho internacional humanitario, el acceso para la entrega de ayuda humanitaria a las zonas bajo su control", han destacado también la UE y EEUU.
Por último, las organizaciones y países firmantes de esta declaración han llamado a las partes a garantizar la seguridad de las embajadas extranjeras y otras misiones diplomáticas, organismos multilaterales, representantes de los medios de comunicación, aeropuertos y organizaciones no gubernamentales y su personal afgano e internacional.