Publicado 17/09/2019 15:20

AMP.- Afganistán.- Cerca de 50 muertos en dos atentados talibán en Afganistán

MADRID, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -

Al menos 48 personas han muerto y otras 80 han resultado heridas este martes como consecuencia de dos atentados perpetrados por los talibán afganos en la capital afgana, Kabul, y en la provincia de Paruán, en el este del país, según han informado las autoridades locales.

El ataque con más víctimas ha tenido lugar en la ciudad de Charikar, en la provincia de Parúan, cerca de un acto electoral de campaña del actual presidente afgano, Ashraf Ghani, y ha dejado un balance de 26 muertos y 42 heridos, según la cadena de televisión Tolo.

En Kabul, otro atentado perpetrado por un terrorista suicida cerca de un edificio dependiente del Ministerio de Defensa afgano ha acabado con la vida de 22 personas y ha dejado heridas a otras 38, según ha contado el portavoz del Ministerio del Interior afgano, Nasrat Rahimi.

Wahida Sahkar, portavoz del gobernador de la provincia de Paruán, ha dicho que el atentado cerca del acto electoral de campaña de Ghani ha sido perpetrado con un artefacto colocado en un vehículo de los servicios de seguridad. El ataque ha dejado 26 muertos y 42 heridos, según el último balance de víctimas.

"Hay mujeres y niños y la mayoría de las víctimas serían civiles", ha asegurado el responsable de un hospital local, Abdul Qasim Sangin, antes de señalar que la cifra de víctimas "podría aumentar" en las próximas horas.

Los talibán se han atribuido la responsabilidad por los dos atentados de este martes, que empañan los preparativos para las elecciones del 28 de septiembre. El grupo ha llamado a boicotear estos comicios, en los que Ghani aspira a la reelección como presidente frente a una terna de candidatos en los que también figura el primer ministro, Abdulá Abdulá.

Las conversaciones de paz entre los talibán y Estados Unidos se rompieron la semana pasada, alejando por tanto la posibilidad de que se pudiese llegar a un acuerdo para avanzar en el repliegue militar a cambio de garantías de seguridad por parte de la insurgencia. El Gobierno afgano no participaba en el diálogo porque los talibán se niegan a aceptarlos como interlocutores.