Publicado 09/07/2020 13:37

AMP.- Australia/China.- Australia suspende el acuerdo de extradición con Hong Kong en respuesta a la Ley de Seguridad

MADRID, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -

El primer ministro de Australia, Scott Morrison, ha anunciado este jueves la suspensión del acuerdo de extradición con Hong Kong y ha ofrecido a ciertos hongkoneses una ampliación de sus visados en respuesta a la nueva Ley de Seguridad Nacional para el territorio aprobada por China.

Según Morrison, que ha acusado a China de "represión de la disidencia y las libertades personales", el acuerdo de extradición queda suspendido debido a que la polémica ley representa "un cambio fundamental en las circunstancias", según ha informado la cadena de televisión ABC.

En cuanto a los visados, el primer ministro ha concretado que se ampliarán los de trabajo y estudios, por lo que los hongkoneses que ya se encuentren en Australia podrán permanecer en el país durante cinco años. Esta medida ofrece a estas personas la posibilidad de obtener la residencia permanente en el país.

"El impacto más significativo de las decisiones que tomamos hoy es para aquellas 10.000 personas que ya están en Australia", ha señalado Morrison, al tiempo que ha asegurado que los canales para que Australia acoja a "refugiados humanitarios" siguen disponibles "para personas de todo el mundo".

Un portavoz del Ministerio de Exteriors chino, Zhao Lijian, ha criticado la decisión de Australia y ha instado a este país a dejar de interferir en cuestiones internas del gigante asiático. "No prosperará ningún intento de presionar a China", ha dicho, advirtiendo de que Pekín se reserva el derecho a responder, según DPA.

AUMENTO DE TENSIONES

Australia se encuentra entre los países que más críticos han sido con la Ley de Seguridad Nacional para Hong Kong de Pekín. Esta misma semana, y en un contexto de tensión creciente entre ambos países, Australia actualizó su alerta de viaje para China y advirtió de que los ciudadanos provenientes de Australia podrían verse sometidos a "detenciones arbitrarias" si entran en el gigante asiático.

Los roces se han incrementado especialmente después de que Canberra abogara por la apertura de una investigación independiente sobre el origen del coronavirus. Además, Australia ha acusado a China de llevar a cabo ciberataques, mientras que Pekín ha alertado de estudiantes y turistas chinos de la posibilidad de sufrir ataques racistas si viajan a territorio australiano.