MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
China y Estados Unidos permitirán a los periodistas procedentes de ambos países entrar y salir libremente respetando los protocolos de seguridad impuestos por la pandemia de COVID-19, después de las tensiones sobre este asunto de los últimos meses.
Según fuentes del Ministerio de Exteriores chino, citadas por el diario 'China Daily', Estados Unidos expedirá visados múltiples anuales para los periodistas chinos y abordará inmediatamente el asunto del "plazo de vigencia del estatus".
Por su parte, China, basándose en el principio de reciprocidad, se ha comprometido a garantizar que a los periodistas estadounidenses se les proporciona un tratamiento equitativo en el país asiático en cuento las medidas estadounidenses entren en vigor.
Las fuentes citadas por el diario chino han especificado que el consenso alcanzado es resultado de más de un año de "difíciles negociaciones" sobre el tratamiento a los medios de comunicación en ambos países. No obstante, y calificando el acuerdo como "bueno" para ambas partes, han incidido en que refleja la normalidad de las relaciones entre Washington y Pekín.
Al respecto, un portavoz del Departamento de Estado ha confirmado este martes que China había accedido a expedir visados a un grupo de reporteros estadounidenses, y que permitiría a los periodistas que se encuentran en el país salir y volver cuando deseen, haciendo Washington lo mismo, recoge la agencia de noticias estadounidense Bloomberg.
"Nos hemos mantenido en estrecha consulta con los medios afectados, así como con otros medios que enfrentan escasez de personal (...) y nos complace que sus corresponsales puedan regresar a China para continuar con sus trabajo importante", ha manifestado el portavoz, para señalar que este acuerdo es un "paso inicial" en las relaciones de los países.
Los periodistas chinos tenían que volver a solicitar sus visados si dejaban el país por un corto período de tiempo o para visitar China. En 2018, el Departamento de Seguridad Interior de Estados Unidos anunció un límite de 90 días para los visados de periodistas, alegando como razón la "represión del periodismo independiente" en el gigante asiático. El permiso era prorrogable en periodos sucesivos de tres meses.
China ha expulsado a varios periodistas de periódicos estadounidenses, mientras que Estados Unidos ha designado como agentes extranjeros a varios medios públicos chinos.