Publicado 30/04/2020 13:16

AMP.- Coronavirus.- Fernández niega "liberaciones masivas" de presos y habla de "campaña mediática" contra su Gobierno

El presidente de Argentina, Alberto Fernández.
El presidente de Argentina, Alberto Fernández. - Esteban Collazo/Presidencia Arge / DPA

Las primeras excarcelaciones han provocado críticas de opositores y oficialistas y caceroladas

MADRID, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Argentina, Alberto Fernández, ha salido al paso de las críticas de algunos sectores que acusan a su Gobierno de preparar "liberaciones masivas" de presos para evitar brotes de la Covid-19 en los centros penitenciarios, denunciando que hay "una campaña mediática" detrás de estas aseveraciones.

Fernández ha explicado que, si bien él se opone a ejercer su facultad para llevar a cabo indultos, también es cierto, ha recordado, que varios organismos e instituciones internacionales han recomendado aliviar la saturación de los centros penitenciarios para no poner en riesgo la vida de reclusos y trabajadores.

"Argentina, como todo el mundo, se enfrenta a una pandemia de enormes proporciones. El riesgo de contagio se potencia en los lugares de mucha concentración humana, por lo que las cárceles se convierten en un ámbito propicio para la expansión de la enfermedad", ha escrito en Twitter.

En ese sentido, Fernández ha criticado "la malintencionada campaña que se ha desatado en redes y medios de comunicación induciendo a hacer creer a la ciudadanía que el Gobierno prepara una salida masiva de gente detenida en virtud de procesos penales".

Así, y pese a "campañas mediáticas" que pretenden hacer creer que el Gobierno "quiere favorecer la libertad de quienes han sido condenados", Fernández ha insistido en que esta situación está "en manos de la Justicia".

"La solución del problema está en manos de los tribunales. Son los jueces naturales quienes, de considerarlo necesario, disponen libertades", ha zanjado el inquilino de la Casa Rosada.

PROTESTAS EN CÁRCELES y BALCONES

Al igual que en otros países de América Latina, donde también se está dando este debate, la situación de las cárceles argentinas es complicada, ya que el hacinamiento en las mismas se convierte en el escenario perfecto para la transmisión de enfermedades.

En los últimos días se han producido incidentes en varios centros. El más violento tuvo lugar en la Unidad N42 de Florencia Varela, en Buenos Aires, donde los presos se amotinaron tras confirmarse el primer enfermo de coronavirus entre ellos. Un reo murió en los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad.

Desde entonces, las protestas entre reclusos se han sucedido más allá de Buenos Aires. El pasado lunes, unos cien presos de la cárcel de Boulogne Sur Mer, en Mendoza, se subieron al tejado durante horas para exigir protección frente a la pandemia.

En consecuencia, el Gobierno ya ha puesto bajo arresto domiciliario a más de 950 presos y se espera que se sumen más en los próximos días, lo que ha generado una fuerte reacción en partidos políticos, incluido el oficialismo, y la sociedad civil.

Desde la Propuesta Republicana (PRO) del ex presidente Mauricio Macri, la ex ministra de Seguridad Patricia Bullrich ha advertido de que se deshará el trabajo de los últimos años. "Recuperamos 10.000 prófugos en cuatro años de gestión y ahora los liberan a todos (...) Los presos tienen que estar presos, sino entramos en el mundo del revés", ha dicho.

También se ha mostrado en contra el oficialista Sergio Massa, presidente de la Cámara de Diputados, quien ha avisado a "los jueces que liberen a los presos que pueden ser sometidos a un juicio político".

En change.org la petición para frenar las excarcelaciones por el coronavirus ha alcanzado más de 470.000 firmas y por redes sociales se ha convocado a caceroladas de protestas a las 20.00 (hora local), la primera de las cuales se celebró el miércoles.

En su último balance de la situación de la pandemia, las autoridades argentinas han confirmado 4.127 casos de contagio y 207 fallecimientos, diez más que el día anterior.