MADRID, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades sanitarias de Indonesia han notificado este jueves 4.850 nuevos casos de coronavirus en 24 horas, una cifra sin precedentes desde el inicio de la pandemia y que eleva por encima de 320.000 el balance provisional de positivos en el país asiático.
En concreto, Indonesia ya tiene registrados 320.564 casos, mientras que la cifra de fallecidos ha aumentado a 11.580, 108 más que en el balance ofrecido el miércoles por el Ministerio de Sanidad. Más de 244.000 personas han superado por ahora la enfermedad, según el diario 'The Jakarta Post'.
El presidente indonesio, Joko Widodo, ha abogado por adoptar medidas de confinamiento localizado para contener la pandemia sin causar estragos en la economía, en vista de que el país se prepara para sufrir en 2020 su primera contracción del PIB desde la crisis regional de 1997, informa Bloomberg.
PROTESTAS
La Policía de Indonesia ha hecho uso este jueves de gases lacrimógenos para sofocar una nueva protesta frente al palacio presidencial en Yakarta, la capital del país, en el marco del tercer día consecutivo de disturbios contra la reforma laboral.
Miles de personas han vuelto a salir a la calle para protestar contra la nueva Ley de Creación de Empleo, que según voces crítica abaratará los despidos y perjudicará a los trabajadores en beneficio de empresas e inversores.
Sobre las 14.00 horas, una multitud se ha congregado frente a las principales oficinas del Gobierno en la calle West Merdeka, donde se han registrado enfrentamientos entre manifestantes y agentes, según informaciones de la cadena CNA.
Los manifestantes han lanzado piedras contra la Policía en un intento por romper el cordón de seguridad, pero se han topado con los cañones de agua de los antidisturbios. No obstante, un puesto policial ha sido incendiado.
Poco antes, más de un millar de manifestantes se han congregado junto al Parlamento, donde han bloqueado una de las calles de acceso al edificio a pesar de la fuerte presencia policial. Los manifestantes han pedido a la Policía retirar la barricada al grito de "larga vida a los trabajadores".
Según el Gobierno, la ley --que fue aprobada el lunes por el Parlamento-- está diseñada para atraer inversores, si bien las voces críticas aseguran que socavará los derechos laborales.
Las autoridades han indicado que cientos de personas habrían sido detenidas, entre ellas las que trataban de atravesar los controles policiales.