Polonia reforzará su frontera con mil efectivos después de que el fin de semana más de 300 migrantes intentaran cruzar irregularmente
MADRID, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Servicio Estatal de Fronteras de Letonia ha denunciado a las autoridades bielorrusas por haber facilitado este domingo la entrada ilegal a su territorio de varios migrantes, rompiendo incluso unas de las vallas que separa ambos países.
Varios agentes de la guardia fronteriza de Bielorrusia rompieron un tramo de la valla para que estas personas cruzaran y tras ello, la repararon para evitar que pudieran regresar, según recoge el portal de noticias báltico Delfi.
No obstante, los migrantes fueron detenidos y devueltos por las autoridades letonas a Bielorrusia, como marca el decreto de emergencia establecido desde agosto de 2021 por el Gobierno de Riga para hacer frente a la crisis migratoria.
No es la primera vez que Letonia alerta de las supuestas provocaciones que llegan desde el otro lado de la frontera con Bielorrusia, a cuyas autoridades se reprocha estar haciendo uso del drama la migración como arma arrojadiza para desestabilizar la región, en represalia por las sanciones de la Unión Europea.
Por su parte, las autoridades de Polonia, otro de los países afectados por estas supuestas maniobras de Minsk, ha adelantado que enviarán unos mil efectivos militares a la frontera, después de que más de 300 migrantes intentaran cruzar irregularmente durante el fin de semana.
"Necesitamos muchas más fuerzas en la frontera", ha reclamado el ministro polaco del Interior, Maciej Wasik, quien ha dicho mostrarse convencido de que Bielorrusia está detrás de todos estos intentos por cruzar, recoge la agencia de noticias PAP.
"Esto no sería posible sin la participación de las autoridades bielorrusas", ha asegurado Wasik, quien también ha alertado de que cada vez son más las agresiones que sufren los agentes polacos que custodian la frontera, que suman casi unos 7.000 efectivos, entre militare y guardias fronterizos.
La semana pasada, los otros dos países afectados por estas supuestas maniobras de Minsk, Polonia y Lituania, se reunieron para abordar asuntos y problemas de seguridad comunes, llegando incluso, en el caso de Vilna, a plantear la posibilidad de cerrar por completo su frontera con Bielorrusia.
Polonia y los países bálticos sostienen que Bielorrusia apoya estos intentos de pasar hacia el otro lado --sufragando autobuses de migrantes y dotándoles de enseres y víveres para establecerse en las inmediaciones antes de cruzar-- en represalia por las sanciones impuestas por la UE tras la violencia postelectoral de 2020, cuyos comicios ratificaron por sexta vez el mandato de Alexander Lukashenko.
La llegada durante las últimas semanas de mercenarios del Grupo Wagner --se estima que hay unos 4.000 efectivos apostados en un área limítrofe con Polonia-- ha enturbiado aún más las relaciones entre Minsk y los países de la región.