MADRID, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
Las fuerzas de seguridad de Malta han detenido este viernes por segunda vez al empresario Yorgen Fenech, al que investigan por su presunta implicación en el asesinato de la periodista Daphne Caruana Galizia, apenas unas horas después de que el primer ministro, Joseph Muscat, justificase su puesta en libertad.
El empresario fue detenido en la madrugada del miércoles y la ley de Malta establece un periodo de arresto máximo de 48 horas. Durante este tiempo, el sospechoso debe pasar a disposición judicial o quedar en libertad, por lo que la Policía optó el jueves por dejarlo libre.
Este viernes, durante un registro a su yate, ha sido detenido de nuevo, según fuentes citadas por el diario 'Times of Malta'.
Muscat había justificado su liberación provisional previa alegando que la Policía se garantizaba de esta forma derecho a proseguir los interrogatorios. "Si una persona comparece ante el tribunal, no puede seguir siendo interrogada por la Policía y, este caso, la Policía quiere seguir interrogándolo", ha declarado ante los periodistas, según la agencia Reuters.
"La Policía sabe lo que está haciendo, tienen que cumplir la ley y al mismo tiempo no perjudicar la investigación", ha aseverado Muscat, que ha instado a la oposición a no hacer un uso partidista del caso. "Su interés y el mío es conocer todos los hechos", ha añadido.
La detención de Fenech tuvo lugar un día después de que el Gobierno anunciara que indultará a un supuesto intermediario --identificado como Melvin Theuma-- en el asesinato de Caruana Galizia si identificaba al cerebro del ataque con bomba que acabó con la vida de la periodista en octubre de 2017.
Muscat ha confirmado el traslado de Theuma a un hospital aunque ha aclarado que su estado aparentemente no es preocupante. También ha apuntado que las declaraciones realizadas hasta ahora por este hombre están siendo analizadas por las fuerzas de seguridad, que buscan corroborar su veracidad.
Otros tres hombres están a la espera de juicio por su supuesta participación directa en la activación de la bomba, si bien la falta de datos acerca de quién dio la orden sigue siendo motivo de críticas contra las autoridades.