MADRID, 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
Al menos tres milicianos proiraníes han muerto este viernes en un nuevo bombardeo achacado a Israel contra una zona situada al sur de Damasco, según ha informado el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, sin que por ahora haya informaciones sobre víctimas y sin que el Ejército israelí se haya pronunciado al respecto.
El organismo, con sede en Londres e informantes en el país asiático, ha indicado que entre las víctimas mortales hay un iraní y un iraquí, antes de afirmar que el bombardeo habría tenido como objetivo una granja en una carretera cercana a Sayida Zainab.
Asimismo, ha destacado que también ha sido alcanzado una instalación propiedad del partido-milicia chií libanés Hezbolá en el área de Al Ghazlaniyá, en la carretera del aeropuerto de Damasco, si bien ha agregado que la misma había sido evacuada previamente.
El Ministerio de Defensa sirio había indicado poco antes en un comunicado publicado en su cuenta en la red social Facebook que la "agresión aérea" ha tenido lugar en torno a las 4.20 horas (hora local) "desde la dirección del Golán sirio". Asimismo, ha manifestado que los objetivos han sido "varios puntos al sur de Damasco". "Nuestros sistemas de defensa aérea respondieron y derribaron varios misiles, con los daños limitados a daños materiales", ha zanjado.
El Ejército de Israel confirmó el miércoles bombardeos contra "infraestructura militar" de Siria en los alrededores de la ciudad de Daraa (sur) tras el disparo de proyectiles desde territorio sirio. Apenas dos días antes, Damasco denunció varios muertos en un bombardeo contra posiciones de la Guardia Revolucionaria de Irán al sur de la capital.
Irán ha acusado a Israel de la muerte de varios miembros de la Guardia Revolucionaria en bombardeos contra el país árabe, incluido Razi Musavi, uno de sus principales asesores en Siria y una figura cercana al antiguo jefe de la Fuerza Quds, Qasem Soleimani, muerto en enero de 2020 en un bombardeo estadounidense en Irak.
Las autoridades de Israel reconocen ataques en Siria argumentando que actúan para evitar el establecimiento de ases iraníes y el envío de armas a Hezbolá por parte de Teherán, que apoya al presidente sirio, Bashar al Assad, en el marco de la guerra que estalló en 2011.