Publicado 31/12/2019 13:04

AMP2.- Irak.- Manifestantes atacan la Embajada de EEUU en Irak para protestar contra los ataques a una milicia

MADRID, 31 Dic. (EUROPA PRESS) -

Miles de manifestantes y líderes milicianos se han concentrado este martes junto a la Embajada de Estados Unidos en Irak para protestar contra los ataques aéreos perpetrados contra objetivos de Kataib Hezbolá, un milicia afín a Irán, en los últimos días.

La concentración ha tenido lugar tras los funerales celebrados en Bagdad de varios de los muertos en los bombardeos del domingo, tal y como ha recogido la cadena de televisión iraquí Al Sumaria.

Algunos de los asistentes a la concentración han arrojado piedras contra el complejo diplomático, mientras que otros han coreado consignas contra Estados Unidos y su presidente, Donald Trump.

También se han registrado incendios en la zona de acceso y en un puesto de seguridad ubicado en la entrada de las instalaciones, según la agencia de noticias Reuters.

El líder del grupo Asaib Ahl al Haq, Qais al Jazali, y otros dirigentes milicianos se han sumado a esta movilización, en la que se han ondeando banderas de Kataib Hezbolá como gesto de apoyo.

Las fuerzas especiales se han desplegado en la zona para impedir cualquier posible asalto y han utilizado gases lacrimógenos y granadas aturdidoras para dispersar a los manifestantes ante la escalada de las tensiones.

Los milicianos han solicitado igualmente la disolución de la concentración a través de altavoces, mientras que las Fuerzas de Movilización Popular (FMP) --una coalición de milicias progubernamentales-- han indicado que al menos 20 personas han resultado heridas.

Fuentes del Ministerio de Exteriores iraquí citadas por Reuters han confirmado que la mayor parte de los funcionarios de la Embajada, incluido el embajador, han sido evacuados como medida de prevención, aunque en el interior permanece parte del personal de seguridad de las instalaciones.

Por su parte, el primer ministro iraquí en funciones, Adel Abdul Mahdi, ha reclamado en un comunicado a los concentrados que abandonen "inmediatamente" la zona, según Al Sumaria.

Así, ha advertido de que las fuerzas de seguridad actuarán para evitar "cualquier agresión o acoso" contra embajadas o representaciones diplomáticas extranjeras y ha agregado que los responsables de estos actos serán castigados por la ley.

Por último, Abdul Mahdi ha recordado que el Gobierno "ha condenado a los más altos niveles" los bombardeos estadounidenses y ha recalcado que ha adoptado "medidas para hacer frente a la situación de una forma que garantice la soberanía de Irak y la seguridad de sus ciudadanos".

Al lugar se ha trasladado el ministro de Defensa iraquí, Naya al Shammari, según fuentes oficiales, mientras que el ministro del Interior, Yasin al Yasiri, ha recalcado que hay "esfuerzos en marcha" para "calmar la situación".

Los bombardeos del domingo, que se saldaron con la muerte de 25 milicianos y 55 heridos, fueron llevados a cabo en respuesta a un ataque con proyectiles ejecutado el viernes contra una base militar iraquí cerca de la ciudad de Kirkuk (norte) en el que murió un contratista estadounidense y resultaron heridos cuatro militares norteamericanos y dos iraquíes.

En concreto, fueron bombardeados tres objetivos en Irak y dos en Siria en los que había almacenes de armamento y centros de mando del grupo empleados por Kataib Hezbolá para planificar y perpetrar ataques contra las fuerzas de la coalición, según Washington.

IRAK "REVISARÁ" SU RELACIÓN CON LA COALICIÓN

La protesta ha tenido lugar un día después de que el Consejo de Seguridad Nacional de Irak anunciara que "revisará" su relación con la coalición internacional que encabeza Estados Unidos tras los bombardeos.

El organismo celebró el lunes una reunión encabezada por el primer ministro en funciones y criticó en un comunicado posterior que los ataques fueron llevados a cabo de forma unilateral y supusieron una violación a la soberanía del país.

Así, recalcó que las fuerzas atacadas "son parte de un frente en la lucha contra el grupo terrorista Estado Islámico, por lo que (los bombardeos) ponen en peligro la seguridad y la soberanía de Irak, pero también la seguridad de todos, sin excepción".

Las FMP agrupan a una serie de milicias --muchas de ellas apoyadas por Irán-- alineadas con el Gobierno iraquí y que participaron en las operaciones contra el grupo yihadista Estado Islámico.

"Este ataque viola los objetivos y principios por los que se formó la coalición internacional, lo que lleva a Irak a revisar su relación a nivel político, legal y de seguridad (con la coalición)", apuntó.

Por su parte, Abdul Mahdi indicó que el ataque "es inaceptable" y advirtió de que "tendrá repercusiones peligrosas".

ADVERTENCIA DE LAS FMP

Asimismo, el 'número dos' de las FMP, Yamal Yaafar Ibrahimi, conocido como 'Abú Mahdi al Muhandis', aseguró que el grupo dará una "dura respuesta" al bombardeo y resaltó que "la sangre de los mártires y heridos no será derramada en vano".

'Abú Mahdi al Muhandis' es, además del 'número dos' de las FMP, un importante aliado de Teherán en el país y antiguo líder de Kataib Hezbolá, grupo que fundó en 2003 en respuesta a la invasión de las tropas estadounidenses.

Además, el principal clérigo chií de Irak, el ayatolá Alí al Sistani, condenó los bombardeos y argumentó que "es necesario respetar la soberanía iraquí y no violarla bajo el pretexto de responder a las prácticas ilegales de algunas partes", antes de agregar que "sólo las autoridades iraquíes pueden hacer frente a estas prácticas y tomar medidas para evitarlas".

Al Sistani solicitó además a las autoridades que den respuesta a estas acciones "para garantizar que Irak no se convierte en un campo en el que se ajustan cuentas regionales e internacionales y que otros no interfieren en sus asuntos internos".

Los bombardeos vuelven a situar a Irak como eje del pulso político entre Estados Unidos e Irán, en un momento en el que el país árabe se ve sacudido por una serie de movilizaciones sociales que mantienen contra las cuerdas al Gobierno de Abdul Mahdi.

Entre las demandas de los manifestantes antigubernamentales se cuelan de hecho críticas contra el papel que desempeñan milicias como Kataib Hezbolá como sustento del Ejecutivo iraquí.