El nuevo gobernante afirma que "corren tiempos de cambio" y que se deben tomar decisiones, en alusión al TLC con Estados Unidos
SAN JOSÉ, 8 May. (EP/AP) -
El ex mandatario costarricense Óscar Arias asumió hoy la presidencia del país por segunda vez con una serie de promesas para resolver la pobreza en el país y devolver la confianza en los políticos.
"A partir de hoy tendremos un rumbo definido en materia de honestidad y ética en la función pública. No he llegado a este puesto para complacer a ningún grupo, sino para defender el interés de la sociedad costarricense en su conjunto", expresó en su discurso después de prestar juramento como gobernante.
Además, el también premio Nobel de la Paz, de 65 años, especificó, en un acto celebrado en el Estadio Nacional de San José, que quiere una "patria próspera" y, por lo tanto, subrayó que "es tiempo de que Costa Rica cambie porque es lo correcto".
Anunció que su política se enfocará a la salud, la educación, el combate a la pobreza, al narcotráfico y en lograr más y mejores empleos, tareas que, según explicó, requieren gran inversión estatal, por lo que aseguró que solucionará "la perenne crisis fiscal con un sistema tributario igualitario y progresivo".
También señaló que buscará reformar los sectores de energía, telecomunicaciones y de infraestructura, pues afirmó que "durante años" se han venido "posponiendo soluciones". "Corren tiempos de cambio, hemos llegado a una encrucijada y debemos tomar una decisión", continuó, en alusión indirecta a la ratificación del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, el cual espera su aprobación en el Congreso y contempla la apertura de los monopolios estatales en algunas de esas áreas.
MANIFESTACIÓN CONTRA EL TLC
Mientras unas 17.000 personas escuchaban a Arias en el Estadio de San José, otras 4.000 participaron fuera del recinto en una manifestación que exigía el retiro del acuerdo comercial del legislativo.
A la investidura de Arias asistieron los presidentes de los países centroamericanos, Colombia, México, Ecuador, Taiwán, el Príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, y la primera dama de EEUU, Laura Bush, así como más de 90 delegaciones internacionales y artistas, como los españoles Víctor Manuel y Ana Belén.
Entre los más aplaudidos destacó el polaco Lech Walesa, otro galardonado con el Nobel en 1983. También fue ovacionado el príncipe Felipe de Asturias, que por tercera ocasión consecutiva asiste a un traspaso de mando en Costa Rica.