Actualizado 28/02/2013 21:05

AMPL.- Cuba.- Cuba pidió cambiar la Posición Común como contrapartida para repatriar a Carromero, pero España se negó

José Manuel García-Margallo, en el Congreso
EUROPA PRESS

CiU y UPyD piden al Gobierno que trabaje para que se aclaren las circunstancias en las que murieron Payá y Cepero


MADRID, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -

El régimen cubano pidió a España que desplegara gestiones para modificar la Posición Común de UE hacia la isla --que La Habana considera una injerencia en sus asuntos internos-- como "contraprestación" por trasladar a nuestro país al dirigente de Nuevas Generaciones del PP Angel Carromero, pero el Ejecutivo de Mariano Rajoy no accedió.

Así lo ha revelado el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, en su comparecencia ante la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso para explicar las gestiones llevadas a cabo para trasladar a Carromero a España después de que fuera condenado a cuatro años de prisión por el homicidio imprudente de los disidentes cubanos Oswaldo Payá y Harold Cepero.

El ministro ha asegurado que se negó a aceptar la petición de La Habana en relación con la modificación de la Posición Común, que condiciona la colaboración de la UE con la isla a que se produzcan avances en materia de Derechos Humanos y avances hacia una transición hacia la democracia. A pesar de eso, Cuba accedió a trasladar al español "sin contraprestación política ninguna", ha aseverado.

García-Margallo ha recordado que antes de que se produjera el pasado 22 de julio el accidente de tráfico en el que murieron Payá y Cepero el Gobierno español ya había fijado su posición respecto de la aspiración cubana de eliminar la Posición Común, que pasa por mantener la Posición Común, si bien defiende una "interpretación flexible" de la misma que pueda permitir incluso suscribir un acuerdo de cooperación con la isla.

"Dije que (los europeos) no modificábamos la Posición Común, y no la hemos modificado nunca, a pesar de que se me pidió como contraprestación para sacar al señor Carromero", ha indicado.

El objetivo "fundamental" de la Posición Común, ha subrayado, es "incentivar un proceso de transición a una democracia pluralista con respeto de los Derechos Humanos y libertades fundamentales y una recuperación sostenible y la mejora de las condiciones de vida del pueblo cubano".

Esa Posición Común, ha insistido, "ni se modificó antes, ni durante el cautiverio del señor Carromero ni se modificará después".

El jefe de la diplomacia española ha querido recordar que no es la primera vez que el régimen castrista accede a trasladar a un preso español a su país de origen. Lo hizo con el periodista Sebastián Martínez Ferraté al poco de llegar el PP al Ejecutivo y con otro preso condenado por tráfico de drogas y que fue repatriado a nuestro país en diciembre pasado junto a Carromero.

Los diputados de CiU Jordi Xuclà y UPyD Irene Lozano han preguntado al ministro si el Gobierno español "se cree" la versión que sobre el accidente han dado las autoridades cubanas y que la familia de Oswaldo Payá pone en cuestión.

La familia de Payá se niega a aceptar que el accidente lo provocara una conducción imprudente por parte de Carromero y denuncia la existencia de un segundo vehículo, conducido presuntamente por miembros de la seguridad del régimen, que seguía a los opositores y que les golpeó por detrás.

Sobre este punto, el ministro ha contestado a los diputados que en el acuerdo firmado por los Gobiernos español y cubano para proceder al traslado de Carromero la parte española "reconoce" el proceso judicial llevado a cabo contra el dirigente de Nuevas Generaciones y la "legitimidad de la sentencia" dictada por la Sala Primera de lo Penal del Tribunal Provincial Popular de Granma, declaración aceptada por Carromero.

Esa sentencia consideró probado que el accidente de tráfico en el que murieron Payá y Cepero se produjo "como consecuencia de la conducta imprudente" de Carromero, que era quien conducía el vehículo accidentado.

Por tanto, ha explicado el ministro, el Ejecutivo español debe cumplir "lo pactado" y no podría pronunciarse ahora de manera diferente a como lo hizo firmando el memorando para traer de regreso a Carromero.

Xuclà y Lozano también han pedido al ministro que trabaje para que se aclaren las circunstancias en las que se produjo el accidente. Si el primero solicitó al Ejecutivo que insista ante las autoridades cubanas para que den una versión detallada de los hechos, Lozano defendió la puesta en marcha de una investigación internacional como reclama la familia de Payá.

La representante de UPyD ha lamentado que el Gobierno haya dado "cobertura internacional a la versión oficial cubana", porque "nada podía resultar más conveniente para la dictadura cubana que esta posición de España", país "con gran influencia en la zona".

Estas declaraciones de Lozano movieron al diputado 'popular' Teófilo de Luis a pedirle que las retirara para que no constaran en el diario de sesiones, pero la representante de UPyD se ha opuesto.

García-Margallo ha hecho un llamamiento a la "responsabilidad" a Lozano porque hay cuatro españoles en la actualidad pendientes de que se dicte sentencia contra ellos en Cuba. Que su posterior traslado a España pueda frustrarse, ha dicho el ministro, "dependerá de afirmaciones tan gratuitas" como las de la diputada de UPyD.

PSOE PIDE MISMO TRATO PARA OTROS PRESOS

Por parte del Grupo Socialista, el diputado Alex Sáez ha llamado la atención sobre la rapidez con la que se procedió al traslado de Carromero en comparación con la media de 18 meses que tardan en resolverse los expedientes de traslado de los presos españoles en el extranjero, que ascienden a día de hoy a 2.500.

Por eso ha pedido la "misma atención y esfuerzo diplomático" para otros presos en el extranjero que están pendientes de su traslado a nuestro país para cumplir aquí el resto de su condena.

El ministro no ha aclarado si él o personal de su departamento van a recibir a la hija de Oswaldo Payá, Rosa María, que está de visita en España.