Actualizado 06/06/2013 03:07

Agricultores estudian una huelga comercial contra políticas de Gobierno


BUENOS AIRES, 6 Jun. (Reuters/EP) -

Agricultores argentinos evalúan realizar una huelga comercial en los próximos dos meses en protesta contra las políticas oficiales para el sector que afectan la rentabilidad de la actividad, anunció este miércoles un representante de una de las principales entidades rurales.

El país sudamericano es el principal exportador mundial de aceite y harina de soja, y el tercero de maíz, pero sus agricultores mantienen una larga disputa con la presidenta Cristina Fernández por los impuestos a las exportaciones de granos y límites a la venta al exterior de trigo y maíz.

"Es probable que en algún momento, yo diría que en los próximos dos meses, la Mesa de Enlace (los representantes de las principales asociaciones agropecuarias del país) establezca una medida de fuerza", que podría ser una huelga comercial, dijo a Reuters Ernesto Ambrosetti, economista de la Sociedad Rural Argentina (SRA), entidad que aglutina a los grandes hacendados. "Por ahora no es inminente", agregó.

En el influyente mercado de futuros de Chicago, rumores indicaban que las principales asociaciones rurales de Argentina -que incluyen también a la Federación Agraria Argentina, Confederaciones Rurales Argentinas y la Confederación Intercooperativa Agropecuaria- se disponían a lanzar pronto una huelga comercial de 10 días.

Los agricultores argentinos dicen que las restricciones impuestas por el Gobierno a las exportaciones del trigo y el maíz dificultan el cálculo de la superficie que será dedicada a ambos granos cada temporada, y que la elevada inflación, calculada en un 25 por ciento por analistas privados, eleva sus costos de producción.

En el 2008, los chacareros mantuvieron un fuerte conflicto con el Gobierno cuando Fernández quiso elevar el impuesto a la exportación de la soja, el principal cultivo de la nación austral.

En esa oportunidad los chacareros realizaron una serie de huelgas comerciales que llegaron a desabastecer de alimentos a varias ciudades del país.