Publicado 25/10/2019 16:20

Argentina.- Alberto Fernández, el desconocido que despunta como favorito para ganar la Casa Rosada

La candidatura de Fernández de Kirchner a la Vicepresidencia genera suspicacias sobre cuál será su rol en un eventual Gobierno

CÓRDOBA (ARGENTINA), 25 Oct. (EUROPA PRESS) -

Alberto Fernández (Buenos Aires, 1959) era, hasta hace apenas unos meses, un desconocido para la mayoría de los argentinos, pero ahora es el principal favorito para hacerse con la Presidencia de la tercera mayor economía de América Latina.

"No estamos cerrando una campaña electoral, sino un ciclo histórico, para que no volvamos a caer nunca más en las garras del neoliberalismo", dijo el jueves en Mar del Plata, sintetizando el discurso del progresismo 'peronista'.

Fernández, abogado de profesión y docente en la Universidad de Buenos Aires, había sido hasta ahora un operador político en la sombra de los grandes nombres, pero desde muy pequeño tuvo interés por los asuntos públicos, siendo delegado de una unión de estudiantes de tendencia 'peronista' durante la secundaria.

En esos años comenzó a aprender guitarra, llegando a tocar en algunos locales de Buenos Aires. Mantiene su afición por la música hasta ahora. Su perro se llama Dylan, en honor al cantante norteamericano.

Alcanzó la jefatura de la Superintendencia de Seguros de la Nación Argentina en 1989, durante la Presidencia de Carlos Menem (1989-1999). Fue su primer cargo político de importancia.

Posteriormente, se desempeñó como diputado de la Ciudad de Buenos Aires, hasta que el ex presidente Néstor Kirchner (2003-2007) le convenció de tener un proyecto ganador. Fernández fue el jefe de campaña del ex mandatario y, tras la victoria en las urnas, se convirtió en su jefe de Gabinete.

Mantuvo el puesto tras la sucesión de Néstor a Cristina Fernández Kirchner, hasta el 23 de julio de 2008, cuando rompió con la entonces presidenta, tras oponerse a la subida de aranceles a la exportación, que generó fuertes protestas del gestor agropecuario en aquellos días.

Desde entonces, se convirtió en un crítico de la líder argentina. "Del segundo mandato de Cristina a mí me cuesta muchísimo encontrar un elemento valioso", dijo hace cuatro años en una entrevista.

CFK, 'NÚMERO DOS'

Por eso sorprendió cuando, el pasado mayo, apareció junto a Fernández de Kirchner y anunció que se postularía a la Presidencia, con la ex mandataria como candidata a la Vicepresidencia.

Ese binomio ha sido objeto de todo tipo de análisis en Argentina. Parte de la población, entre ellos la mayoría de opositores, según encuestas recientes, cree que la influencia de Fernández de Kirchner será total en el Ejecutivo y que ella será quien gobierne en la sombra.

"Si gana Fernández, gana Cristina, y va a gobernar ella. La que tiene el poder en ese espacio es Cristina Fernández de Kirchner, no tengan ninguna duda", dijo esta semana Miguel Ángel Pichetto, antiguo aliado del 'kirchnerismo' en el Senado y que ahora postula a la Vicepresidencia en la candidatura de Mauricio Macri, el actual presidente, y rival de Fernández en las urnas.

Pero, desde el 'peronismo', según los mismos sondeos, se cree que Fernández sí contará con independencia en el ejercicio del Poder Ejecutivo, que ve cerca, tras superar a Macri por 16 puntos en las primarias de agosto y adelantar al presidente en una media de 20 puntos en encuestas recientes.

"Fernández es un dirigente moderado, que se destacó a lo largo de este proceso histórico como un operador exitoso. Ha sido muy eficiente a la hora de transmitir la estrategia política del 'kirchnerismo' inaugural, el de Néstor, y también ha sido un dirigente sumamente apto para las tareas de Gobierno", cree Mariano Fraschini, politólogo y docente de la Universidad de Buenos Aires.

CANDIDATO TRANSVERSAL

"Se trata de un dirigente que ideológicamente pivota en el centro político. Se caracteriza por la búsqueda de consenso, y la ampliación de la base de sustentación", añade el analista.

Ese pragmatismo ha sido criticado desde los sectores más dogmáticos del 'peronismo', que ven a Fernández como un neoliberal, tras haber sido diputado de la Ciudad de Buenos Aires con una alianza de centro derecha.

El candidato 'peronista' pretende reestructurar la elevada deuda del país mediante una negociación como la que realizó Uruguay a principios de siglo, que no implique quita sino ampliación en el vencimiento de bonos.

Quiere además aumentar los impuestos a las personas físicas, porque cree que Macri sólo se ha centrado en cobrarle a las empresas.

Propone, además, aumentar salarios, reducir las tasas de interés y apostar por el superávit fiscal y comercial.

Fernández, que afronta su primer gran reto individual en las urnas, tiene grandes posibilidades de alcanzar la Presidencia sin haber sido antes alcalde, gobernador o diputado nacional.