MADRID, 10 Sep. (EUROPA PRESS) -
Este viernes ha arrancado el período de reflexión en Argentina tras el cierre de la campaña electoral de las elecciones primarias del domingo, en las que los argentinos elegirán a los candidatos que podrán concurrir a los comicios legislativos del 14 de noviembre y que se perfilan cómo un referéndum de los dos primeros años de mandato del presidente, Alberto Fernández.
Las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO), determinarán los candidatos que en noviembre podrán presentarse para la renovación de la mitad de la Cámara de Diputados --127 escaños están en juego-- y un tercio del Senado --24 escaños--.
Desde las 8.00 horas (hora local) de este viernes está prohibido realizar actos públicos de campaña, así como difundir encuestas electorales y ofrecer o entregar a los electores papeletas de sufragio en un radio de ochenta metros de las colegios. Las prohibiciones se extenderán hasta tres horas después del cierre de urnas el domingo, es decir, hasta las 21.00 horas, informa Télam.
Los sondeos otorgan al oficialismo, que se presenta agrupado bajo el Frente de Todos, una victoria por un estrecho margen a nivel nacional, aunque auguran su caída en la provincia y ciudad de Buenos Aires --el principal bastión en disputa, ya que reside el 40 por ciento de la población de Argentina--, donde la oposición se haría con el mayor número de votos. La cohesión de las candidaturas del oficialismo le dan, de inicio, una ventaja sobre el opositor Juntos por el Cambio, que presenta hasta seis aspirantes en algunas circunscripciones.
La importancia de las PASO en Argentina recae en que los resultados suelen predecir la intención de voto de los argentinos para los próximos comicios, en este caso el 14 de noviembre, aunque no se espera ninguna sorpresa, con los dos principales bloques que han marcado el ritmo de la política argentina desde el regreso de la democracia liderando los resultados.
No obstante, en estas primarias los ojos estarán puestos en una ultraderecha que, liderada por el economista Javier Milei, ha irrumpido en el escenario político argentino, por lo que las PASO servirán para calibrar su ascenso.
Las primarias argentinas tendrán lugar con la pandemia como telón de fondo, una crisis sanitaria que ya obligó a aplazarlas un mes y que ha llevado a una jueza federal de Buenos Aires con competencias en la ciudad ha determinar que las personas enfermas de COVID-19 o en aislamiento por contacto con un positivo no podrán votar en las elecciones. Una sentencia que, por tanto, contravendría la obligatoriedad del voto en las primarias.