Actualizado 17/12/2013 21:13

Cristina Fernández recibe a Correa en medio de la polémica por Chevron

Rafael Correa y Cristina Fernández de Kirchner
Foto: ENRIQUE MARCARIAN / REUTERS

BUENOS AIRES, 19 Sep. (EUROPA PRESS) -

   La presidenta argentina, Cristina Fernández, ha recibido este jueves a su homólogo ecuatoriano, Rafael Correa, en la Casa Rosada en medio de la polémica por el acuerdo entre la petrolera estatal argentina YPF y la estadounidense Chevron, a la que Correa acusa de contaminar la Amazonia.

   El mandatario ecuatoriano ha pedido en las últimas semanas un boicot contra la petrolera norteamericana y el martes mostró a los periodistas algunas de las zonas que Chevron contaminó hace más de 30 años y cuyos resultados se siguen notando hoy en día.

   Por su parte, la presidenta argentina anunció el mes pasado que YPF contaría con el apoyo de Chevron para explotar de forma conjunta el yacimiento de Vaca Muerta. El Gobierno ecuatoriano ha publicado en los últimos días diversos anuncios en la prensa argentina para advertir de que la compañía causaría el mismo daño medioambiental, según el diario 'Clarín'.

   Correa ha intentado zanjar cualquier posible polémica a su llegada a Buenos Aires y ha destacado su buena relación con Fernández. "Todo nuestro apoyo a la presidenta, esto para evitar todo tipo de especulaciones que se han tenido al respecto", ha destacado el mandatario, según la agencia de noticias oficial Télam. "Confiamos en Cristina, sabemos cómo piensa y siente", ha apostillado.

CASO CHEVRON

   El caso se remonta a la década de 1990, cuando los habitantes del lago Agrio denunciaron a Texaco, adquirida por Chevron en 2001, por contaminar la selva y sus acuíferos con cientos de vertidos entre 1964 y 1992, provocando daños en el medio ambiente y en la salud pública, incluidas muertes por cáncer.

   Chevron, por su parte, sostiene que los pozos donde se realizaron los vertidos tóxicos fueron limpiados y que sus actividades no son responsables de ninguno de los daños causados al medio ambiente y a la salud pública.

   En el primer asalto judicial, un tribunal ecuatoriano condenó en 2011 a la empresa estadounidense a pagar 18.200 millones de dólares (13.732 millones de euros) que, debido a su negativa a hacerlo, han ascendido a 19.000 (14.335).

   Chevron, que ya no tiene intereses en Ecuador, ha llevado a cabo una ardua tarea para evitar el pago. En febrero de 2011, presentó una denuncia ante un tribunal federal de Nueva York contra los demandantes y sus abogados, argumentando que el veredicto se obtuvo mediante fraude.

   Además, en marzo de 2012 trasladó el caso al Tribunal Permanente de Arbitraje (TPA), con sede en La Haya, que se declaró competente argumentando que Ecuador no respetó el tratado bilateral sobre protección de inversiones.