Actualizado 27/09/2006 00:24

Argentina.- El gobernador Solá no descarta que el testigo clave desaparecido haya sido secuestrado por la Policía


BUENOS AIRES, 26 Sep. (Del corresponsal de EUROPA PRESS Rafael Saralegui) -

El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Felipe Solá, no descarta que haya policías implicados en la desaparición del testigo Jorge Julio López, cuyo testimonio fue clave para la condena del ex represor Miguel Etchecolatz, ex jefe de investigaciones de la policía de la provincia de Buenos Aires, durante la dictadura militar.

"No descartamos que haya policías involucrados y si López fue secuestrado hay que pensar a quiénes perjudicarían", dijo Solá en declaraciones a la prensa. El gobernador se reunió hoy con representantes de distintas organizaciones para pedirles colaboración en la búsqueda de López, de 77 años.

Después de la reunión Solá aseguró que la aparición de López es en estos momentos "una cuestión fundamental para la democracia". "Es el primer desaparecido desde el terrorismo de Estado al que no se puede encontrar después de una semana. Su condición de testigo fue fundamental en el caso Etchecolatz", remarcó Solá.

El gobernador bonaerense consideró que Jorge Julio López "podría haber sido secuestrado por su condición de testigo fundamental en el caso contra (Miguel) Etchecolatz" y añadió que "nos cabe suponer que pueda haber sido secuestrado para intimidar a futuros testigos en otros juicios".

"Para la gente que cada rato ve que se busca el paradero de alguien, que es una persona anciana, pueden pensar que perdió la memoria. Pero quisiéramos que cambien, que hagan un click en la forma de mirar esto. Bo tiene nada que ver con una desaparición cualquiera, esta desaparición es clave y necesitamos que todo el pueblo argentino nos ayude a encontrarlo", afirmó.

El testimonio de Jorge Julio López fue clave para condenar a Etchecolatz por secuestros, tortuas y homicido por parte del Tribunal Oral Federal de la ciudad de La Plata, que calificó los delitos ocurridos durante la dictadura militar (1976-1983) como parte de "un genocidio".