BUENOS AIRES, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
El jefe de Gabinete argentino, Aníbal Fernández, pidió expresamente al vicepresidente del país, Julio Cobos, y al ex presidente Eduardo Duhalde que no acudieran ayer a la capilla ardiente instalada en la Casa Rosada con los restos mortales del ex presidente Néstor Kirchner.
Así lo asegura este viernes el diario 'Clarín', que precisa que Fernández habría pedido a ambos que no acudieran a la sede de gobierno a ofrecer su apoyo a la presidenta, Cristina Fernández, para "evitar alguna provocación" y que se produjeran incidentes con los miles de argentinos que se habían congregado en la Plaza de Mayo y ante la Casa Rosada en recuerdo de Kirchner.
Según el diario, Cobos, en su calidad del presidente del Senado, había contactado desde Mendoza el mismo miércoles tras conocerse la muerte de Kirchner con el ministro del Interior, Florencio Randazzo, para ofrecer la sede del Congreso para velar al ex presidente.
Horas después, ya en Buenos Aires, el vicepresidente, enfrentado con la presidenta y su marido, se entera de que el velatorio se instalaría en la Casa Rosada y se comunica con la Secretaría General de la Presidencia, que primero contesta con evasivas hasta que le dicen que "lo más conveniente es que no venga", relata 'Clarín'.
No obstante, Cobos insistió ayer y se comunicó con el jefe de Gabinete quien le repitió que "lo más conveniente es que no vengas". A través de un comunicado, el vicepresidente explicó que había "intentado coordinar por las vías institucionales el momento adecuado para asistir a las exequias, recibiendo como respuesta que no lo hiciera". "Por esta razón y a pesar de mi voluntad de concurrir, tomé la decisión de no hacerlo y evitar así cualquier situación que perturbe este momento de reflexión y dolor", explicó.
Por su parte, el ex presidente Duhalde, que estaba en Brasil, apresuró su regreso al país para participar en el funeral de Kirchner y saludar a la presidenta. Sin embargo, también en su caso se le recomendó que no se presentara en la Casa Rosada. "Me llamó el jefe de Gabinete y me dijo que para evitar provocaciones era inconveniente mi presencia y por eso no iré a Casa de Gobierno", indicó.
Duhalde, que bendijo la candidatura de Kirchner en 2003 a la presidencia y dos años después rompió con el entonces presidente, ha dejado claro que no va a hacer más declaraciones. "Mis sinceras condolencias a la presidenta Cristina Fernández", remachó.