BUENOS AIRES, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Senado de Argentina ha aprobado, con 52 votos a favor y tres en contra, el proyecto de ley que permitirá que los menores de 16 años de edad puedan votar en las elecciones nacionales, según ha informado la agencia de noticias Télam.
Para su aprobación, han sido necesarias varias horas de debate parlamentario en las que se han acordado algunas modificaciones del proyecto de ley inicial presentado por el partido gobernante, el Frente para la Victoria (FpV).
Tras ello, se ha llevado a cabo la votación, en la que la versión final del proyecto de ley ha recibido un amplio apoyo del oficialismo y de la oposición, aunque algunos partidos políticos --como el Frente Amplio Progresista, el Peronismo Federal y la Unión Cívica Radical-- han llegado divididos y ha habido votos en contra y abstenciones
El proyecto de ley reconoce a los ciudadanos argentinos menores de 16 años de edad todos los derechos políticos enunciados en la Constitución, incluido el derecho a votar, aunque en su caso no será obligatorio, a diferencia de los adultos argentinos, por lo que, de no ejercerlo, no serán incluidos en el registro de infractores.
Para poner en práctica el proyecto de ley será necesario modificar un total de seis normas jurídicas, incluidas las disposiciones que afectan a la actualización del documentos nacional de identidad, que a partir de ahora deberá hacerse a los 14 años de edad, dos antes de lo previsto en la legislación vigente.
Tras su aprobación en el Senado, el proyecto de ley tendrá que recibir el visto bueno de la Cámara de Diputados para entrar en vigor. Según los cálculos del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, la norma jurídica debería poder aplicarse en las elecciones legislativas del próximo año.
UN COLECTIVO MANIPULABLE
La iniciativa legislativa del grupo oficialista en el Parlamento ha sido muy criticada por algunos sectores de la oposición, que argumentan que la nueva ley servirá para incluir en la base de electores a un colectivo sumamente manipulable.
En alusión a estas críticas, el jefe del bloque del FpV en el Senado, Miguel Angel Pichetto, ha sostenido que "los jóvenes de 16 años de edad están preparados para definir su destino porque comprenden la realidad que vive el país". "No hay que subestimarlos", ha advertido.
En la misma línea, el senador del FpV Aníbal Fernández ha argumentado que "a los pibes ya se les han dado muchas responsabilidad, por ejemplo, son imputables ante la ley y pueden trabajar con autorización de sus padres".