BUENOS AIRES, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
La vuelta el martes por la tarde del alcalde de Buenos Aires, Mauricio Macri, y sus críticas al Gobierno de la presidenta argentina, Cristina Fernández, han convertido el temporal que ha afectado al norte del país en motivo de enfrentamiento político entre el Ejecutivo y el Gobierno local.
Al menos ocho personas murieron el martes en Buenos Aires por las lluvias, y este miércoles, otras 40 han fallecido en La Plata, al sureste de la capital. Además, 2.500 personas han tenido que ser evacuadas en La Plata y más de 70.000 personas siguen sin luz en Buenos Aires.
La vicejefa del Gobierno local, María Eugenia Vidal, contactó con Macri el lunes por la tarde para comunicarle la situación en la que se estaba sumiendo la ciudad por el temporal de viento y lluvias. "¿Cuál es el nivel de la catástrofe?", preguntó Macri. "Total", respondió Vidal.
Mientras, el secretario de Estado de Seguridad argentino, Sergio Berni, responsabilizó a Macri de la catástrofe por no hacer las obras necesarias para evitar inundaciones en el centro de la ciudad y por no aparecer en medio del temporal. "Macri nunca está donde tiene que estar", ha criticado.
Tras numerosas especulaciones, Macri dio una rueda de prensa el martes y arremetió contra el Gobierno. "No me parece nada bien que una vez más desde el gobierno nacional se pongan a hacer politiquería con esto, porque son los responsables de que las obras no se hagan. La Nación no brindó la autorización de financiamiento. Espero que tome conciencia de esto y que nos dejen ir al Banco Mundial a sacar un crédito", denunció.
Macri pidió que "el Gobierno nacional tome conciencia y ponga en marcha la obra" o que otorgue la financiación para poder emprender los planes de obras.