Publicado 01/10/2019 18:21

A.Saudí.- El hijo de Jashogi acusa a "enemigos" de Arabia Saudí de "explotar" el caso

MADRID, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -

Salá Jashogi, hijo del periodista Yamal Jashogi, asesinado el 2 de octubre en el interior del consulado saudí en Estambul, ha acusado a los "enemigos" de Riad de "explotar" el caso para cargar contra las autoridades del país árabe.

"Ha pasado un año desde el fallecimiento de mi padre, un periodo durante el que adversarios y enemigos de la patria han explotado la causa de mi padre para socavar a mi país y mis líderes", ha dicho, en un mensaje publicado en su cuenta en Twitter.

"Mi padre nunca toleró ningún abuso o intento de dañar (al país). No aceptaré que se use su memoria o su causa sean usadas para lograrlo después de su muerte", ha agregado.

Asimismo, ha recalcado que tiene "total confianza" en el aparato judicial saudí y ha agregado que espera que los responsables de este "atroz crimen" rindan cuentas por sus actos. "Seré como fue Yamal Jashogi, fiel a Dios, la patria y sus líderes", ha zanjado.

Jashogi, un periodista crítico con el régimen saudí que vivía fuera del país y que escribía para el diario 'The Washington Post', fue asesinado el 2 de octubre de 2018 en el interior del consulado de Arabia Saudí en Estambul, donde había acudido para hacer los trámites para poder casarse con su prometida.

Tras varias declaraciones contradictorias sobre lo que le sucedió a Jashogi, el Gobierno saudí reconoció que fue asesinado dentro de la legación diplomática por funcionarios que terminaron desmembrando su cuerpo.

El Ejecutivo turco ha dicho en anteriores ocasiones que está trabajando en colaboración con otros países en el marco de la investigación del asesinato de Jashogi y ha acusado a las autoridades saudíes de no estar cooperando para descubrir la verdad.

Los fiscales saudíes han solicitado la pena de muerte para cinco de los once sospechosos detenidos por el asesinato del periodista crítico, que provocó la condena de la comunidad internacional y que dañó gravemente la imagen reformadora del príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salmán.

El propio Bin Salmán ha reconocido, en un documental de la televisión estadounidense PBS, su "responsabilidad" en el asesinato porque el crimen sucedió bajo su "supervisión". Sin embargo, ha negado haber dado la orden.