MADRID, 15 Sep. (EUROPA PRESS) -
Tres de los 293 refugiados rohingyas que llegaron la semana pasada a Indonesia tras siete meses de travesía marítima han perdido la vida, según el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), que estima que una treintena más fallecieron en el viaje desde Bangladesh.
Más de una tercera parte del grupo ha necesitado atención médica a su llegada a la isla de Aceh, pero tres de los refugiados --un hombre y dos mujeres, todos ellos menores de 25 años-- no han sobrevivido. Una portavoz de ACNUR, Shabia Mantoo, ha expresado la "profunda preocupación" de la agencia por la salud de todos ellos.
Cuatro de cada cinco refugiados son mujeres y niños, "muchos" de ellos sin padres y algunos sin ningún tipo de tutor. "Al menos un niño, de doce años, se quedó sin nadie que le cuidase durante el viaje tras morir su padre", ha contado Mantoo.
A la "frágil condición física" que sufren la mayoría por la travesía maríma desde Cox's Bazar se suman también "graves traumas" derivados de la experiencia. "Este trágico episodio recuerda a los países de la región que una acción ágil para darle (al barco) un puerto seguro habría salvado decenas de vidas", ha lamentado la portavoz de la agencia.
No en vano, la embarcación fue rechazada en varias ocasiones a lo largo de su periplo, tal como ha ocurrido con otros barcos en estos últimos meses. Las organizaciones defensoras de los Derechos Humanos han advertido de que estos recelos a los desembarcos ponen en peligro la vida de los migrantes y refugiados a bordo.