MADRID 23 May. (EUROPA PRESS) -
La cifra de muertos las inundaciones registradas durante los últimos días en el estado australiano de Nueva Gales del Sur, en la costa este del país, ha ascendido a cinco, según han informado este viernes las autoridades del país, que hace frente a intensas precipitaciones.
El balance ha aumentado después de que los equipos de emergencias hayan recuperado durante las últimas horas el cuerpo sin vida de un hombre de 80 años en su propiedad de Nueva Gales del Sur, una de la zonas más afectadas por las inundaciones.
A esta quinta víctima mortal se suma un hombre de 63 años cuyos restos han sido hallados en una vivienda de Moto, a 250 kilómetros de la ciudad de Sídney. Previamente, las autoridades habían confirmado la muerte de dos hombres de 30 y 53 años, quienes fueron hallados sin vida en una vivienda inundada de Moto, así como el fallecimiento de una mujer de unos 60 años, que no logró escapar con vida de una fuerte riada tras verse atrapada en el interior de su vehículo.
El primer ministro del país, Anthony Albanese, se ha trasladado hasta la zona en señal de apoyo a la población afectada, a la que ha pedido no utilizar los coches. "Si está inundado, olvídense", ha dicho, según informaciones recogidas por la cadena de televisión ABC.
Así, ha trasladado sus mejores deseos a estas comunidades, a las que ha asegurado que "no están solas". "El Gobierno federal y el local está con ustedes. El pueblo australiano está también con ustedes", ha puntualizado durante una rueda de prensa en la que ha lamentado el aumento de los "eventos climatológicos adversos". "Está ocurriendo cada vez con mayor frecuencia y mayor intensidad", ha dicho.
El ministro principal de la región, Chris Minns, ha lamentado la pérdida de vidas humanas y ha pedido a toda la población estar preparada para "que las malas condiciones meteorológicas se alarguen".
El jueves, cerca de 50.000 personas tuvieron que ser evacuadas de sus viviendas, la mayoría de ellas en las zonas de Taree, Port Macquarie y Wingham. Además, miles de personas se quedaron sin suministro eléctrico y muchos colegios tuvieron que suspender las clases.