MADRID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades penitenciarias georgianas han rechazado que la salud del expresidente Mijail Saakashvili se haya visto deteriorada tras su detención en el país a pesar de que su médico personal, Nikoloz Kipshidze, ha alertado de su estado a medida que avanza la huelga de hambre.
"Tiene dificultades para moverse y le es difícil incluso hablar", ha lamentado el médico, que ha indicado que su estado de salud se ha deteriorado significativamente durante los últimos días, según informaciones del portal Civil.
Además, ha explicado que el expresidente georgiano padece de talasemia, un trastorno sanguíneo hereditario que implica un bajo nivel de hemoglobina en sangre y que generalmente provoca anemia.
Si bien la talasemia no suele ser peligrosa, el médico ha señalado que "nadie que la padezca debe hacer una huelga de hambre dado que provoca cambios irreversibles en le cuerpo".
Por su parte, el Servicio Penitenciario Especial de Georgia ha negado que su condición se haya agravado y ha calificado su salud de "satisfactoria". Así, ha matizado que Saakashvili está tomando su medicación como corresponde.
Tras conocer estas informaciones, los líderes del Movimiento Nacional Unido, así como los seguidores del expresidente, se han manifestado en las inmediaciones de la prisión en la que se encuentra detenido.
El domingo, el diputado Tako Charkviani, líder del partido Ley y Justicia, convocó una protesta en frente del Parlamento para exigir su puesta en libertad. Estas marchas se han repetido a lo largo del fin de semana en varias ciudades de Europa y Estados Unidos.