Actualizado 12/12/2018 08:47

Bachelet discute con Nicaragua el regreso de la oficina de DDHH de ONU

Michelle Bachelet
REUTERS / DENIS BALIBOUSE

   MADRID, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -

   La Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, ha indicado este martes que su oficina está discutiendo con el Gobierno de Nicaragua el posible retorno de su personal al país centroamericano, del que fue expulsado a finales de agosto.

   Según ha contado en un acto celebrado en Madrid con motivo del 70º aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos, su oficina ha trasladado al Gobierno de Nicaragua que está "dispuesta a volver" de acuerdo con "las condiciones que se fijen". "Hemos recibido una carta de ellos invitándonos a conversar para que podamos volver", ha señalado.

   El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, ordenó el pasado 31 de agosto expulsar del país a la delegación del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, dos días después de que la agencia de la ONU emitiera un informe en el que acusaba al Gobierno y grupos afines de reprimir brutalmente las protestas que estallaron en abril y perseguir a los críticos.

   El Gobierno nicaragüense dijo entonces que daba por terminada la "invitación" que había cursado a la oficina que dirige Bachelet con el propósito de dar acompañamiento a la Comisión de Verificación y Seguimiento formada por la Organización de Estados Americanos (OEA).

   Por otra parte, Bachelet ha indicado que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, le ha remitido "una invitación" para que visite el país y que este lunes habló con el ministro de Exteriores venezolano, Jorge Arreaza, para estudiar el envío de una misión de su oficina y una posterior visita de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos.

   Por otra parte, la expresidenta chilena ha recalcado la importancia que tuvo en su día la Declaración Universal de los Derechos Humanos y ha subrayado que se trata de derechos que son "universales" e "indivisibles", por lo que tienen que aplicarse en todos los países y a todos "los seres humanos", con independencia de su condición, género, origen o religión.

   Bachelet también ha dicho que si todos los países que conforman el Consejo de Derechos Humanos se les exigiera el cumplimiento del "100 por cien" del contenido de la Declaración Universal, desconoce si habría "muchos países" integrados en el organismo.

   La responsable de la ONU ha destacado como ejemplo positivo en materia de derechos la evolución de Túnez, por sus avances en el reconocimiento de los derechos de la mujer.

BORRELL: HOY NO SE APROBARÍA LA DECLARACIÓN UNIVERSAL

   Por su parte, el ministro español de Asuntos Exteriores, Cooperación y Unión Europea, Josep Borrell, ha señalado que a día de hoy la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948 no se habría aprobado por falta de consenso para hacerlo y ha puesto como "prueba" de la dificultad de lograr un respaldo unánime lo que ha sucedido esta semana en Marrakech con el Pacto Mundial para las Migraciones.

   Además de poner en valor la importancia de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el jefe de la diplomacia española ha confiado en que la Unión Europea siga comprometida en la defensa de sus valores fundamentales.

   Por su parte, la activista congoleña Caddy Adzuba, premio Príncipe de Asturias de la Concordia 2014, ha reclamado a la comunidad internacional que se implique a fondo para poner fin a los conflictos y las guerras y ha apelado a la responsabilidad de las empresas que se benefician de minerales y materiales extraídos en condiciones que vulneran los Derechos Humanos, como es el caso de la extracción de cobalto y coltán en su país, la República Democrática del Congo.

   "¿Qué le hemos hecho a Dios para merecer esto?", ha planteado la activista, una firme defensora de los derechos de la mujer que ha estado luchando para erradicar la violación como arma de guerra en su país y en otras naciones en conflicto.

   Adzuba ha recalcado que Occidente debe implicarse en la defensa de los Derechos Humanos en África y ha pedido responsabilidad para exigir a las empresas que explotan recursos en el continente africano que lo hagan respetando los derechos fundamentales y permitiendo a los africanos beneficiarse de las riquezas de sus países.