Publicado 02/10/2021 23:32

Bangladesh.- Detenidos tres presuntos dirigentes de las milicias rogingyas en Bangladesh

Archivo - Bangladesh. Thousands Of New Rohingya Refugee Arrivals Cross The Border
Archivo - Bangladesh. Thousands Of New Rohingya Refugee Arrivals Cross The Border - UNIVERSIDAD ANTONIO DE NEBRIJA - Archivo

DACCA, 2 Oct. (DPA/EP) -

La Policía de Bangladesh ha detenido a tres presuntos dirigentes de las milicias rogingyas activas entre los refugiados de esta etnia huidos desde Birmana y que estarían relacionados con el asesinato de un destacado activista de Derechos Humanos rohingya, Mohib Ullah.

"Los asesinos van a ser llevados ante la justicia con toda seguridad. Ninguno podrá escapar", ha afirmado el ministro de Exteriores de Bangladesh, AK Abdul Momen.

Ulla era el director de la Sociedad Rohingya Arakan para la Paz y los Derechos Humanos (ARSPH, por sus siglas en inglés). Fue tiroteado el pasado miércoles en el campamento de refugiados de Kutupalong, uno de los más grandes del mundo.

Tras su muerte, distintas voces de la comunidad internacional han presionado a las autoridades bangladeshíes para que investigaran este crimen.

En Kutupalong, ubicado en la región de Cox'x Bazar, viven cientos de miles de refugiados rohingyas musulmanes huidos de la persecución en Birmania, un país de mayoría budista.

Más de un millón de musulmanes rohingya viven en refugios construidos principalmente con polietileno y bambú en Cox's Bazar, a unos 300 kilómetros de la capital bangladeshí, Daca. Unos 750.000 han cruzado la frontera desde Birmania a raíz de las operaciones puestas en marcha por el Ejército en agosto de 2017.

Investigadores de Naciones Unidas concluyeron en 2018 que la campaña militar tuvo intención genocida atendiendo, entre otras razones, al lenguaje utilizado por las autoridades, la existencia de planes y políticas discriminatorias y de destrucción y la brutalidad de la campaña militar.

Los rohingya son una minoría étnica de fe musulmana que se concentra en el estado birmano Rajine. Birmania los considera descendientes de inmigrantes ilegales procedentes de Bangladesh y no los reconoce como ciudadanos, privándoles con ello de derechos básicos.