MADRID, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Policía de Bielorrusia ha detenido a unas 200 personas en todo el país por hacer llamamientos a "tomar las armas y las calles" y realizar comentarios negativos sobre la muerte de un agente de la Agencia de Seguridad del Estado (KGB) durante un tiroteo en un apartamento ubicado en Minsk, en canales de Telegram.
Así lo ha confirmado a la agencia de noticias BelTA el ministro del Interior bielorruso, Ivan Kubrakov, que ha agregado que "algunos de ellos trataban de divertirse exagerando" sobre la muerte del agente.
Kubrakov ha detallado que los detenidos "escribían todo tipo de inmundicias" en canales de Telegram esperando que nadie los encontrara". "Todos ellos están en prisión y se han abierto investigaciones penales", ha resumido, antes de advertir de que las autoridades bielorrusas buscan identidades de "más y más" personas.
Una vez detenidos, el comportamiento de estos "luchadores por la libertad", en palabras de Kubrakov, ha cambiado. "En Internet pedían asesinar a personas, no sólo a agentes de las fuerzas de seguridad, sino a ciudadanos con opiniones diferentes", ha indicado. "Una vez que han sido detenidos y se enfrentan a cargos, lloran y comienzan a recordar a sus familiares y amigos", ha agregado.
Entre los arrestados figura un periodista del tabloide ruso 'Komsomolskaya Pravda', que había informado sobre el caso. El diario cerró sus oficinas en Bielorrusia como consecuencia de la investigación, según ha recogido la agencia de noticias DPA.
Por su parte, el grupo de Derechos Humanos Viasna ha reconocido a 73 de los arrestados como presos políticos. Según su recuento, el número de personas encarceladas por razones políticas en Bielorrusia ha aumentado hasta superar las 800.
El KGB buscaba hace más de una semana a un especialista en Tecnologías de la Información que las autoridades consideraban parte de la oposición. El especialista disparó y mató al agente, tras lo que fue abatido.
Bielorrusia ha registrado manifestaciones masivas contra el presidente, Alexander Lukashenko, tras las elecciones de agosto de 2020, consideradas "fraudulentas".