MADRID, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, ha reprochado a la UE que "no ha aprendido nada del pasado" en respuesta a las sanciones impuestas por los Veintisiete contra Minsk, aunque ha cargado en concreto contra Alemania ya que no esperaba que "participara en esta conspiración colectiva".
"Nos están estrangulando, sistemática y colectivamente, arruinándonos, tratando de acabar con nuestra economía", ha criticado el presidente bielorruso tras asegurar que la UE está tratando de destruir al país mientras le "exige protección contra el contrabando y el narcotráfico", recoge la agencia de noticias BelTA.
Lukashenko ha aseverado que como "la guerra informativa no ha tenido los resultados esperados", ahora se ha procedido a la "guerra económica", y se ha preguntado si "el siguiente paso" será la "intervención".
"Hemos estado en guerra durante mucho tiempo", ha precisado Lukashenko, solo que "la guerra ha asumido diferentes formas", aunque "hoy la guerra comienza desde dentro del Estado", ha advertido, tras añadir que Bielorrusia no cederá "su patria, independencia y soberanía".
En un acto en conmemoración de la invasión de la Alemania nazi a la Unión Soviética el 22 de junio de 1941, Lukashenko ha recriminado que los "antepasados (alemanes) mataron a uno de cada tres bielorrusos en la Gran Guerra Patriótica y a millones de niños por nacer", tras lo que han pasado "80 años suplicando por el perdón", ha aseverado.
Frente al "arrepentimiento y sollozos" de los alemanes, Bielorrusia fue "amable y tolerante", "¿y qué recibimos a cambio?", ha cuestionado Lukashenko, para preguntar al ministro de Exteriores alemán, Heiko Maas, si es "un alemán arrepentido o un heredero de los nazis", después de sus declaraciones en las que aseguraba que las sanciones deberían aplicarse también a la economía bielorrusa.
Por último, ha sugerido a Alemania que debería hacer "algo más que arrepentirse", y le ha sugerido "arrodillarse ante el pueblo bielorruso durante otros 100 años" para agradecerles "la oportunidad de nacer después de la guerra". Así, en vez de "estrangularlos", Berlín debería "hacer todo lo posible por curar las heridas de la guerra".
La Unión Europea adoptó el lunes la cuarta ronda de sanciones en Bielorrusia que afectará a 78 responsables de la represión continuada del Gobierno de Alexander Lukashenko, incluyendo los responsables del desvío del vuelo de Ryanair a Minsk para detener al periodista Roman Protasevich.