Publicado 10/12/2021 12:40

Birmania.- La oficina de DDHH de la ONU denuncia la "alarmante" escalada de abusos en Birmania

Protesta contra la junta militar de Birmania en Rangún
Protesta contra la junta militar de Birmania en Rangún - SANTOSH KRL / ZUMA PRESS / CONTACTOPHOTO

MADRID, 10 Dic. (EUROPA PRESS) -

Las violaciones de derechos y libertades en Birmania están viviendo una "escalada alarmante", en opinión del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, que ha denunciado, entre otras cosas, la muerte y quema de once civiles, cinco de ellos menores de edad, a manos de las Fuerzas Armadas y el atropello indiscriminado de manifestantes pacíficos en Rangún.

Más de diez meses después del golpe de Estado, la oficina de la ONU cree que la represión a llegado a niveles "sin precedentes", con "graves violaciones" que se registran "todos los días" y que implican violaciones del derecho a la vida, a la libertad y la seguridad, de la prohibición de torturas, del derecho a un juicio justo y de la libertad de expresión.

Más de 1.300 personas han muerto desde el golpe y la cifra de detenidos supera ya los 10.600. El portavoz del Alto Comisionado, Rupert Colville, cree que es momento de una respuesta "firme, unida y decidida" por parte de la comunidad internacional, a la que ha instado a "redoblar esfuerzos" en favor de la rendición de cuentas y de la "restauración de la democracia" en Birmania.

La ONU ha recibido en las últimas semanas "múltiples" informaciones que dan cuenta de pueblos quemados como el de Thantlang, en el estado de Chin, donde un grupo de militares habría prendido fuego a 450 viviendas, u otro caso en la región de Kayah en el que varios civiles murieron quemados tras refugiarse en un inmueble.

Uno de los casos que más consternación ha despertado ocurrió el 7 de diciembre, cuando una unidad del Ejército fue atacada supuestamente por milicianos en la región de Sagaing y los militares respondieron asaltando el pueblo de Done Taw. Detuvieron a once hombres, cinco de ellos menores, y les prendieron fuego.

"Estos ataques son atroces, completamente inaceptables e incumplen los valores comunes de humanidad. Están lejos de ser algo aislado", ha sentenciado Colville.