MADRID, 5 May. (EUROPA PRESS) -
Naciones Unidas ha revelado este miércoles que se han constatado 158 ataques contra el sistema sanitario de Birmania desde el principio de febrero, después del golpe de Estado del día 1 de ese mes.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha precisado que este representa el mayor número de ataques registrados contra la sanidad a nivel mundial desde comienzos de 2021. Según ha detallado, once de esos ataques resultaron en muerte de personas y 51 en heridos. Además, 83 ataques se llevaron a cabo contra instalaciones sanitarias, 21 contra ambulancias, 76 contra personal sanitario y 73 contra pacientes.
Asimismo, la OMS tiene constancia de que 51 instalaciones sanitarias de todo el país han estado bajo ocupación militar desde febrero, mientras que 31 permanecen ocupadas. Por otra parte, al menos 139 médicos que han participado en las protestas contra la junta militar birmana han sido imputados, incluidos sanitarios cuyo campo de acción no es fácilmente reemplazable, lo que impacta "significativamente" en la calidad y la cantidad de los servicios médicos disponibles en Birmania.
En este contexto, la ONU ha advertido de que los ataques contra la sanidad representan un "grave riesgo" para proporcionar atención sanitaria y para la lucha contra la COVID-19, lo que puede tener potenciales "consecuencias devastadoras" no solo para Birmania. Así, el organismo ha demandado "protección" para los trabajadores sanitarios, las instalaciones médicas y los pacientes.
El coordinador residente interino de Naciones Unidas y coordinador Humanitario para Birmania, Andrew Kirkwood, ha reiterado en un comunicado el "apoyo" de la delegación de Naciones Unidas en el país a la respuesta a la pandemia de COVID-19 allí, antes de pedir un regreso "a la respuesta integral a la pandemia de COVID-19 anteriormente en curso".